Santa Cruz de Tenerife acogió los pasados 9 y 10 de octubre las VII Jornadas Nacionales de SEDISA (Sociedad Española de Directivos de la Salud). En este encuentro, directivos sanitarios de todo el país abogaron por que los gestores reciban una formación reglada acorde a las necesidades de este tipo de puestos. Asimismo, los participantes se quejaron de las injerencias políticas en las decisiones que deben adoptar. De hecho, solo el 17 por ciento de los directivos reconoce tener autonomía en las decisiones estratégicas de la organización que dirigen. Además, el 70 por ciento de los gestores sanitarios cree que su designación depende de su ideología o color político.
Una afirmación que realizó el director general de Salud de Islas Baleares, Miquel Tomàs Gelabert, durante su intervención en una Mesa de Debate del las VII Jornadas Nacionales de SEDISA, junto a la directora general de Programación Asistencial del Gobierno de Canarias, Antonia María Pérez. En este debate, titulado '¿Qué gerentes necesitamos?', estaba prevista la intervención de José Manuel Aranda Lara, director gerente del Servicio Andaluz de Salud; Luis Carretero Alcántara, director gerente del Servicio de Salud de Castilla La Mancha; y Juana María Reyes Melián, directora general del Servicio Canario de Salud. Sin embargo, todos ellos tuvieron que excusarse debido a que fueron citados por el Ministerio de Sanidad para informarles de las actuaciones derivadas de la detección del primer caso de ébola de Europa, ocurrido en Madrid.
Cambios cada cuatro años en los puestos directivos
El director general de Salud de Islas Baleares lamentó que en los puestos directivos sanitarios se produzcan tantos cambios cada cuatro años. 'Los cambios en los puestos de gestión son contraproducentes para los resultados en Salud. Si ligamos al gestor con un color político nos estamos equivocando'. Asimismo, Tomàs Gelabert explicó que 'cualquier persona que deba tomar decisiones sobre la salud de los ciudadanos deben tener una formación acreditada y reglada, además debe ser capaz de imponer las innovaciones técnicas y farmacológicas que a medio-largo plazo provocarán un ahorro sanitario, aunque en un inicio genere un alto gasto'.
Antonia María Pérez explicó que 'en muchas ocasiones no podemos elegir al mejor gestor para la Sanidad pública, pero tratamos de seleccionar a alguien que posea una serie de características. Es imprescindible que tenga una determinada trayectoria y compromiso, sea ejemplar en su comportamiento, posea empatía, inteligencia emocional y sea capaz de gestionar las situaciones de crisis'. Además, la directora general de Programación Asistencial consideró vital que 'posea una formación reglada y que aprenda a ser un líder'.
Antonia María Pérez añadió que 'creo necesario que en las carreras de la rama sanitaria se incluya formación en gestión. Es importante porque todos los médicos gestionan diariamente recursos. Herramientas como la prescripción o la solicitud de pruebas tienen un impacto directo en el gasto sanitario'. La responsable sanitaria explicó también que 'la Universidad, durante el transcurso del Plan de Estudios de Medicina, también debe formar a los alumnos en cuestiones financieras, de salud pública y en resolución de conflictos'.
Durante esta Mesa de trabajo también se planteó una cuestión que estuvo presente durante los dos días que duraron las jornadas: ¿Es posible la autonomía en la gestión? Miquel Gelabert aseguró que 'todas las comunidades autónomas están haciendo sus experiencias a través de las Unidades de Gestión. En este caso buscamos conciliar 'lo que queremos hacer' con 'lo que podemos hacer'. 'Lamentablemente hay que cumplir una serie de requisitos presupuestarios y eso limita sin duda la capacidad para desarrollar todo lo que nos gustaría', concluyó.