El 90 por ciento de la población española piensa que es 'poco o nada probable' que pueda infectarse con el VIH. Los resultados preliminares de una investigación que ha realizado la Sociedad Española Interdisciplinaria del Sida (SEISIDA), en colaboración con Gilead, que se presentarán en 2013, ponen de manifiesto una realidad: apenas un 30 por ciento de la población en nuestro país se ha hecho alguna vez la prueba del VIH.
Con motivo del Día Nacional de la Prueba del VIH, el 20 de octubre, SEISIDA quiere subrayar la importancia que tiene el diagnóstico precoz en la infección por el VIH y el sida. Se calcula que en España cerca de un 40 por ciento de personas con VIH está sin diagnosticar; es decir, habría entre 30.000 y 40.000 personas con el virus sin diagnosticar.
Este hecho tiene graves implicaciones. Por un lado, las personas que desconocen su diagnóstico no pueden beneficiarse del tratamiento, aumentando así el riesgo de morbilidad y mortalidad. Por otro, el coste del tratamiento y del cuidado de las personas no diagnosticadas es mayor que si se les diagnosticara de forma temprana. Finalmente, las personas diagnosticadas tardíamente pueden ser el origen de la infección de otras personas. Las investigaciones arrojan datos que indican que entre el 54 y el 65 de las nuevas infecciones está causado por personas que no conocían su infección.
Profundizar en las barreras que existen para el diagnóstico precoz ha sido el objetivo de esta investigación de SEISIDA. Hacerse la prueba del VIH es una conducta preventiva de salud, pero también un proceso complejo en el que intervienen determinantes psicosociales relevantes: la vulnerabilidad y la amenaza percibida, la valoración que se hace sobre el afrontamiento y las creencias que se tienen sobre la opinión de las personas de referencia.
Datos de la investigación
Entre algunos de los datos de esta investigación destacan, por ejemplo, que casi un 39 por ciento de los que no se han hecho la prueba 'no sabe dónde ir a hacérsela', o que un 80 por ciento de las personas que no se la han hecho asegura que el motivo es porque el 'médico nunca se lo ha recomendado'.
El informe muestra también que el 53 por ciento de la población piensa que tiene menos posibilidades de infectarse por el VIH que la media de la población, lo que se denomina 'optimismo irrealista', o que un 81 por ciento de la población afirma que le daría miedo descubrir que tiene VIH, algo que se conoce como 'amenaza percibida'.
Estas barreras dificultan el acceso a la prueba del VIH a muchas personas. SEISIDA, al igual que otras organizaciones e instituciones, quiere aprovechar el Día Nacional de la Prueba del VIH para derribarlas y, en un momento como el actual en el que se están comprometiendo algunas de las políticas de prevención del VIH y sida en España, demandar un 'mayor y mejor acceso a los test de detección del VIH'. Ello sería una forma segura, rápida y eficaz de controlar la epidemia en España.
Gratuita y anónima
La prueba del VIH es un sencillo análisis de sangre, mucosa, orina o de saliva que confirma el estado serológico de una persona. Según Julio Montaner, director del Plan del VIH/Sida de la Columbia Británica (Canadá), 'cualquier persona que haya mantenido relaciones sexuales en los últimos 30 o 40 años debe hacerse la prueba'; en cualquier caso, se recomienda hacerse la prueba si: se está embarazada o se piensa estarlo; si se ha practicado sexo no seguro; si se ha compartido material de inyección para el consumo de drogas; se ha padecido alguna infección de transmisión
sexual (ITS), tuberculosis o hepatitis, o si se desea dejar de usar el preservativo con la pareja estable.
Si la prueba es positiva debe confirmarse con una prueba más específica empleando la misma muestra de sangre. Si el resultado es negativo, no es preciso confirmarlo. La prueba para la detección del VIH puede hacerse de forma gratuita y confidencial en los centros asistenciales del sistema sanitario público, clínicas de infecciones de transmisión sexual (ITS), prisiones y centros de atención a drogodependientes.
Algunas ONG también disponen del servicio de realización de la prueba rápida del VIH y se han implantado los test rápidos en farmacias de algunas comunidades autónomas.