El cáncer de mama HR+HER2- es más frecuente de este tipo y afecta al 70% de las pacientes. Dentro de este grupo, un 15% tienen alto riesgo de recaer. Para este grupo, abemaciclib ofrece buenos resultados.
Este año se diagnosticarán 35.000 nuevos casos de cáncer de mama. Es el tumor más prevalente entre las mujeres, según la Sociedad Española de Oncología Médica (SEOM). La mayoría de esos 35.000 tumores se detecta en estadios iniciales, pero una de cada cinco de las…
Este año se diagnosticarán 35.000 nuevos casos de cáncer de mama. Es el tumor más prevalente entre las mujeres, según la Sociedad Española de Oncología Médica (SEOM).
La mayoría de esos 35.000 tumores se detecta en estadios iniciales, pero una de cada cinco de las pacientes sufrirá una recaída a lo largo de su vida. Son más frecuentes en los dos primeros años tras la cirugía o la quimioterapia y la mayoría son de las pacientes con criterios clínicos de alto riesgo de recidiva; es decir, las que tienen 4 o más ganglios afectados, o entre 1 y 3 ganglios afectados y al menos uno de los siguientes factores de riesgo: grado histológico 3, lo que significa que las células de la mama están ya muy mutadas, o que el tumor sea igual o mayor de 5 cm.
El otro 50% de recidivas tiene lugar en los siguientes 7 u 8 años tras la cirugía o la quimioterapia.
En esta situación, es importante contar con un fármaco que tenga intención curativa. Verzenios® (abemaciclib), fármaco made in Spain de Lilly, es un inhibidor de ciclinas para el tratamiento adyuvante del cáncer de mama HR+ y HER2- en estadios iniciales con alto riesgo de recaída. Está disponible en adyuvancia, es decir, que se administra de manera complementaria tras el tratamiento principal o cirugía con el objetivo de evitar la recaída.
Riesgo de recaída
Miguel Martín, presidente del Grupo Español de Investigación en Cáncer de Mama (GEICAM) y jefe del Servicio de Oncología Médica del Hospital Gregorio Marañón de Madrid, ha comentado los resultados del estudio monarchE donde se ha demostrado que el inhibidor de ciclinas, en combinación con una terapia hormonal, reduce el riesgo de recaída en un 33,6% a los cuatro años, con tan solo 2 primeros años de tratamiento. Un beneficio que se incrementa durante el seguimiento a los 3 e incluso 4 años. Además, ha demostrado reducir el riesgo de metástasis en un 34,1% en el mismo periodo y mejorar la supervivencia libre de enfermedad invasiva. “Se ha visto que se evita que el 6% de las pacientes recaiga; aunque parece una cifra baja, es un dato muy importante”, ha destacado el oncólogo.
Mecanismo de acción
El mecanismo de acción de abemaciclib se basa en la inhibición de las ciclinas dependientes de kinasas CDK 4 y 6, que son dos moléculas que potencian la división de las células tumorales. De esta forma, se consigue que las células tumorales sufran un envejecimiento prematuro y mueran, sin afectar a las células sanas, cuya división celular no depende de estas dos moléculas.
María Purificación Martínez, oncóloga médica, jefa del Servicio de Oncología Médica del Hospital Basurto de Bilbao, ha destacado la importancia de estos datos, debido al número de pacientes con cáncer de mama que están en riesgo de recidiva. “Es importante manejar todos los aspectos que impactan en la vida de la paciente: desde el familiar, social, psicológico, laboral…”.
Consultar dudas
La/el paciente tiene que saber que siempre puede acudir al equipo multidisciplinar que le lleva para consultarle cualquier duda. La investigación ha mejorado la calidad de vida de las pacientes, con una cirugía menos agresiva, con una resección de ganglios centinela más selectiva y una reconstrucción inmediata. A esto, María Purificación Martínez ha añadido la menor toxicidad de los tratamientos. “Vamos paso a paso, pero es importante que la paciente se implique en las decisiones terapéuticas”.
Además, ha recordado que el 20% de los largos supervivientes en cáncer lo representan los tumores de mama.
Adherencia terapéutica
Para conseguir estas cifras, es clave la adherencia terapéutica. “Puede darse hasta un 40% de no adherencia a los tratamientos hormonales en pacientes con diagnóstico de cáncer de mama precoz. Si no se toma la medicación, como es obvio, esta no hace efecto y no conseguiremos el objetivo, que no es otro que la curación de las pacientes”, ha apuntado la oncóloga.
Según los datos presentados, abemaciclib presenta baja toxicidad, los efectos adversos que puedan aparecer se resuelven una vez que se termina el tratamiento.
Made in Spain
Tal y como ha detalladado María José Lallena, directora del Centro de Investigación y Desarrollo de Lilly España, el fármaco es made in Spain. “Llevamos más de 35 años trabajando para desarrollar medicamentos que ayuden a mejorar la vida de las personas y cada paso que damos nos acerca más a la meta de curar el cáncer. Esto es posible al trabajo común entre empresa privada, la clínica y la académica, en cuyo triángulo de investigación cada uno aportamos lo mejor, podemos contar con una investigación de excelencia en España”.