Por ejemplo, en la espondilitis anquilosante, el hecho de ser mujer puede llevar a un retraso en el diagnóstico, y esto a su vez, puede ir aparejado a mayores posibilidades de daño estructural
12 de julio 2022. 12:19 pm
En los últimos años los avances en Medicina han permitido observar que existen diferencias en las patologías y en los tratamientos según el género del paciente. Esto ocurre en enfermedades cariovasculares, endocrinas, pero también en las enfermedades reumáticas. Es por ello que desde la Fundación…
En los últimos años los avances en Medicina han permitido observar que existen diferencias en las patologías y en los tratamientos según el género del paciente. Esto ocurre en enfermedades cariovasculares, endocrinas, pero también en las enfermedades reumáticas. Es por ello que desde
la Fundación Viatris para la Salud, sus expertos ven necesario un abordaje específico de género en enfermedades reumáticas.
En realidad, se trata de un posicionamiento que cuenta con el aval de la Coordinadora Española de Asociaciones de Espondiloartritis (CEADE), la Coordinadora Nacional de Artritis (ConArtritis) y la Liga Reumatológica Española (LIRE). Esto se traduce por plantear que esas diferencias sean tenidas en guías clínicas. De esta forma, serán tenidas en cuenta en materia de planificación sanitaria: “para atender de manera más eficaz a las mujeres. Si la prevalencia y la morbimortalidad no es neutra, las políticas sanitarias tampoco deben serlo”.
Se trata en concreto de incluirlas en las
guías “El abordaje integral de la Artritis Reumatoide en las Mujeres. Propuesta de consenso” y “Espondilitis Anquilosante en las Mujeres. Propuesta de consenso”. En las mismas, un grupo de destacados expertos a nivel nacional ha extraído 22 recomendaciones para mejorar la atención integral de las mujeres con estas afecciones.
Abordaje específico de género
Respectos a casos concretos en los que es necesario un abordaje específico de género en enfermedades reumáticas, destaca el caso de la espondilitis anquilosante. En la misma, el hecho de ser mujer puede llevar a un retraso en el diagnóstico. Esto a su vez, puede ir aparejado a mayores posibilidades de daño estructural.
Por otra parte, las mujeres con artritis reumatoide presentan un perfil diferente de comorbilidades del que presentan los hombres. En ellas se da mayor prevalencia de depresión y osteoporosis; incremento de hipotiroidismo o hipertiroidismo, o deficiencia de Vitamina D. Además, se ha podido comprobar que antes del desarrollo de la AR se pueden apreciar comorbilidades como inmunodeficiencias, enfermedades infecciosas y parasitarias, diabetes tipo II, hipertensión, fibrilación y angina de pecho, que no hacen sino aumentar una vez diagnosticada.
En palabras de Javier Anitua, director de la Fundación Viatris para la Salud, se trata de “
dar notoriedad al hecho de la morbilidad diferencial en las enfermedades reumáticas, un empeño con el que la Fundación está firmemente comprometida, y aportar una serie de recomendaciones que buscan una mejora significativa en el abordaje de estas enfermedades”.