En un mundo donde más de 537 millones de personas padecen de diabetes, y con estimaciones que apuntan a que uno de cada nueve adultos la tendrá para 2030, México se enfrenta a una crisis de salud.
De acuerdo con
datos oficiales, la diabetes es la segunda causa de muerte en el país, con 12.4 millones de personas viviendo con esta condición.
Contrario a la creencia que tienen millones de personas, la diabetes tipo 2 no es una condición hereditaria, sino una enfermedad que se desarrolla principalmente por hábitos de vida incorrectos.
El estrés, la mala alimentación, el sedentarismo y el consumo de sustancias nocivas son factores clave que contribuyen a su aparición.
Tratamiento integral
Ante el reto que representa la
diabetes tipo 2 para México, un grupo de especialistas se dieron a la tarea desde el 2021, de crear una plataforma integral para combatir esta enfermedad.
Así nació Be Welly, un proyecto mexicano, que busca impactar la vida de más de 250 mil personas no solo en México, sino también en Latinoamérica, Europa y Estados Unidos.
Su cofundadora, Karen González-Lamb, explica que
Be Welly es un proceso integral que va más allá de dietas y ejercicio.
“Nuestro método incluye la combinación de ejercicio, alimentación inteligente, gestión de emociones, un profundo entendimiento del cuerpo y la comunidad”, dijo.
La especialista explicó que actualmente las nuevas generaciones van a enfermar a menor edad porque están expuestas a alimentos de mala calidad.
En este sentido, aclaró que los alimentos se encuentran mayormente cargados de azúcares, edulcorantes, colorantes artificiales y grasas trans.
Cambio de hábitos
Además, detalló que se ha comprobado que un programa de ocho semanas, con una guía especializada, brinda notables cambios en las personas que deciden tomar control de su salud.
Por ejemplo, refirió que en promedio, el 71 por ciento de las personas bajo este tratamiento baja de peso y 82 por ciento mejora cifras de glucosa desde la segunda semana.
En tanto, el 54 por ciento comienza a dejar sus medicamentos en la cuarta semana, y al finalizar, el 90 por ciento logra resultados y cambios significativos.
“Las próximas generaciones están en riesgo, por ello queremos recordarles que recuperar su salud sí es posible, si se hacen los cambios adecuados en los hábitos y estilo de vida”, finalizó.