Tan solo la EPOC representa una de las primeras diez causas de muerte en el país, con una tasa de mortalidad de 21.55 por cada 100 mil habitantes.
7 de noviembre 2022. 11:16 am
La Sociedad Mexicana de Neumología y Cirugía de Tórax (Smnyct) alertó que a pesar de que los síntomas de la fase aguda del COVID-19 se tienen estudiados, aún no se conoce de manera exacta sus secuelas a largo plazo. Destacó que todavía se desconoce la…
La Sociedad Mexicana de Neumología y Cirugía de Tórax (
Smnyct) alertó que a pesar de que los síntomas de la fase aguda del COVID-19 se tienen estudiados, aún no se conoce de manera exacta sus secuelas a largo plazo. Destacó que todavía se desconoce la relación del COVID-19 con enfermedades respiratorias, como Asma y Enfermedad Pulmonar Obstructiva Crónica (EPOC).
Con el objetivo de analizar y estudiar esa interrelación, la Smnyct junto con la farmacéutica
Boehringer Ingelheim, reunieron a expertos neumólogos.
Estos especialistas, originarios de México, Centroamérica y El Caribe, se dieron cita en la Alianza de Expertos en Neumología (ADEN) 2022. Dicho evento contó con la participación de mas de 100 médicos neumólogos e internistas que analizaron los efectos de las enfermedades respiratorias crónicas (ERC).
El impacto de las enfermedades respiratorias crónicas
La Organización Panamericana de la Salud señala que las enfermedades respiratorias crónicas (ERC) son las principales causas de discapacidad y muerte en el continente.
Tan solo en México, se estima que el siete por ciento de la población vive con asma, mientras que con EPOC la cifra llega casi al ocho por ciento.
De hecho, tan solo la EPOC representa una de las primeras diez causas de muerte en el país, con una tasa de mortalidad de 21.55 por cada 100 mil habitantes. Sin embargo, tanto la EPOC como el asma tienen altos niveles de subdiagnóstico.
Por ejemplo, en México el nivel de
subdiagnóstico para el asma es de 40 por ciento y para la EPOC es mayor, al llegar a 80 por ciento.
Alertan sobre falta de diagnóstico oportuno
Por lo anterior es que un mexicano puede tener dichos padecimientos, pero es probable que no se diagnostiquen a tiempo para llevar un adecuado tratamiento.
Por ejemplo, en México, solamente el 50 por ciento de los pacientes con asma y EPOC tiene un correcto tratamiento.
“La falta de un adecuado seguimiento, se suma a los efectos de largo plazo de asma y EPOC”, afirma el neumólogo Luis Septién, del Instituto Nacional de Ciencias Médicas y Nutrición Salvador Zubirán. El especialista recomendó a los pacientes de enfermedades respiratorias crónicas evaluar con su médico el regreso de su tratamiento normal tras sufrir COVID-19.