Se trata de consecuencias directas e indirectas derivadas de la ansiedad, la disminución del nivel de testosterona y los efectos sobre las enfermedades cardiovasculares y el sistema nervioso
11 de febrero 2022. 12:58 pm
Diversas investigaciones han puesto de manifiesto complicaciones adicionales asociadas a la pandemia ya los sucesivos confinamientos. En este contexto, la vida sexual de las parejas se ha visto afectada, pero también la fisiopatológica. En concreto, expertos encuentran consecuencias de la COVID-19 en la función eréctil….
Diversas investigaciones han puesto de manifiesto complicaciones adicionales asociadas a la pandemia ya los sucesivos confinamientos. En este contexto, la vida sexual de las parejas se ha visto afectada, pero también la fisiopatológica. En concreto, expertos encuentran consecuencias de la COVID-19 en la función eréctil.
Así, durante el próximo Encuentro Mundial de Medicina Sexual, Viatris presenta un simposio para “ampliar los conocimientos para el diagnóstico oportuno y el tratamiento óptimo de la disfunción eréctil en la era COVID-19”. Este tendrá lugar entre los días 17 y 19 de febrero.
Durante esta conferencia se destacará el impacto de COVID-19 en la vida sexual. En concreto, la asociación entre la pandemia y la disfunción eréctil. Pero también, los retos en el manejo de la disfunción eréctil en este complicado entorno sanitario. Así, algunas de las ideas claves serán las consecuencias directas e indirectas derivadas de la ansiedad, la disminución del nivel de testosterona y los efectos sobre las enfermedades cardiovasculares y el sistema nervioso
Consecuencias de la COVID-19 en la función eréctil
Sobre las consecuencias de la COVID-19 en la función eréctil analizaba causas directas e indirectas Emmanuele A. Jannini (MD, OMRI, KSG, KHS - Departamento de Medicina de Sistemas de la Universidad de Roma Tor Vergeta, Italia). Según el mismo, algunas de las causas clave directas son la disfunción endotelial, el hipogonadismo subclínico y el estrés psicológico. Por otra parte, señaló que “las evidencias actuales sugieren que la COVID-19 es un factor de riesgo potencial para las disfunciones sexuales. En particular las masculinas, a través de múltiples mecanismos fisiopatológicos aún no completamente identificados”.
Este experto describe la COVID-19 como un biomarcador paradigmático de la salud sexual y viceversa. Desde un punto de vista fisiopatológico, el profesor Jannini fue más allá al calificar la disfunción eréctil como un biomarcador del síndrome de la COVID persistente. Así, abogaba por el concepto de “la COVID persistente sexual”.
Por otra parte, recordaba que los efectos secundarios de los tratamientos, el trastorno de estrés postraumático y la vulnerabilidad socioeconómica, son identificados por los expertos como múltiples factores que conducen a un mayor riesgo de desarrollar disfunción eréctil.
En el caso español, Joan Mir Pizà, médico de Familia, sexólogo, insistía en que la pandemia, el caso de las relaciones de pareja, “ha supuesto un aumento de las discusiones, de la ingesta de alcohol u otras sustancias con frecuencia”. Es decir, en suma, “conflictos de pareja y aumento de las propuestas de separación/divorcio, que hemos atendido con elevada incidencia principalmente en nuestras consultas de Sexología y Terapia de Pareja, y también en Atención Primaria”.