El estudio busca reducir la prescripción innecesaria de antibióticos y es una iniciativa de Fundación SEMERGEN y la Universidad de León
22 de diciembre 2023. 1:27 pm
La resistencia a los antibióticos es un grave problema de salud pública global, y por ello reducir la prescripción antibiótica innecesaria en Atención Primaria es fundamental. El uso de pruebas rápidas de detección de antígenos de la gripe y COVID-19 puede ser de utilidad para…
La resistencia a los antibióticos es un grave problema de salud pública global, y por ello reducir la prescripción antibiótica innecesaria en Atención Primaria es fundamental. El uso de pruebas rápidas de detección de antígenos de la gripe y COVID-19 puede ser de utilidad para reducir la incertidumbre y la prescripción inadecuada. En este contexto, surge el estudio RAPRIM. Se trata de un Ensayo Clínico que pretende probar la eficacia de un test rápido dual de Gripe y COVID-19 en la reducción de la prescripción antibiótica en Atención Primaria.
El trabajo está promovido por la Fundación SEMERGEN y la Universidad de León. Asimismo, acaba de ser beneficiario de una subvención para Proyectos de I+D+i en Salud en la convocatoria 2023 de Acción Estratégica en Salud 2021-2023 convocada por el Instituto de Salud Carlos III. Alba Marcos Delgado es la investigadora principal del proyecto, junto con Vicente Martín Sánchez como co-investigador principal.
Test rápido para Gripe y COVID-19
El objetivo principal del estudio RAPRIM es determinar la eficacia de la realización de este test rápido de antígenos bivalentes (COVID19 y gripe) en la prescripción de antibióticos en pacientes de Atención Primaria con signos/síntomas de infección respiratoria. Igualmente, evaluar la eficiencia de dichas pruebas en la reducción de consultas, de pruebas complementarias y hospitalizaciones en los pacientes estudiados b.
La implementación de este proyecto, según Alba Marcos, “será particularmente importante para fortalecer los sistemas de vigilancia de riesgos sanitarios. También para aumentar la eficiencia de las políticas sanitarias y la calidad del Sistema Nacional de Salud”.
De esta manera, se espera que ayude a contribuir a la renovación y ampliación de las capacidades de la Atención Primaria, la mejora de la eficiencia y sostenibilidad del sistema sanitario, la reducción de las desigualdades sociales y territoriales y el aumento de la calidad de vida y el bienestar.