La diabetes mal controlada, es decir, con altos niveles de glucosa en sangre, provocan un severo daño en los nervios y vasos sanguíneos, lo que provoca una pérdida de sensibilidad y una falta de irrigación sanguínea y oxígeno, explicó el Doctor Edgar Álvarez Trejo, coordinador de la clínica de cuidado de heridas en el Instituto para el Desarrollo Integral de la Salud (IDISA).
'Debido a este deterioro, estas personas frecuentemente llegan a presentar en sus pies dolor, entumecimiento, hormigueo, falta de sensibilidad y otras alteraciones neuropáticas, complicaciones que, con el paso de los días, semanas o meses, le impiden darse cuenta de lesiones como callos, ampollas y hasta úlceras, porque no tienen ninguna molestia', señala Álvarez Trejo.
El también director de la Escuela Podológica enfatizó que las personas con diabetes descontrolada por mucho tiempo sabemos que ya existe un daño significativo en los vasos sanguíneos y nervios; por ello, la falta de acción para controlar la glucosa, así como no hacer una detección y atención oportunas de una lesión en los pies, en poco tiempo, pueden poner en riesgo la extremidad del paciente y hasta su vida.
Actualmente, existen nuevos tratamientos y tecnologías para la atención de la diabetes y sus complicaciones, en especial, para la atención del pie diabético terapias con apósitos, medicamentos tópicos y sistémicos, así como quirúrgicas, presión negativa y otras que ayudan a evitar amputaciones y mejorar las lesiones del paciente.
'Es muy importante mantener de forma adecuada las condiciones locales de la herida, como controlar la infección, desbridar (retirar) los tejidos que ya no son viables, y otros, así como mantener adecuadamente las condiciones sistémicas del paciente como el control de la glucosa, la presión arterial y otros, por esta razón los paciente con pie diabético necesitan un tratamiento multidisciplinario con un equipo de médicos de diferentes especialidades', apunta el experto.
En el instituto, continúa el especialista, nos hemos especializado en la atención de úlceras y heridas crónicas, principalmente de pie diabético, cuyo éxito es mayor si se atiende desde los primeros síntomas, evitando amputaciones.
Aproximadamente el 85% de nuestros pacientes no se ha realizado una amputación completa de la extremidad, obviamente, cada paciente es un caso único y dependerá del estado de gravedad y control en el que lleguen, puntualizó el especialista.
Diariamente, acuden al instituto personas con infecciones graves de los pies y de otras zonas del cuerpo, y se les realiza un estudio integral de su situación metabólica, neurológica, circulatoria, infecciosa y otros, con el apoyo de un grupo multidisciplinario de especialistas como endocrinólogos, internistas, infectólogos, angiólogos, oftalmólogos, dermatólogos entre otros expertos, para apoyar y atender cualquier necesidad adicional, en el proceso.
También, 'recibimos a pacientes referidos por su médico tratante, quienes traen una serie de estudios de laboratorio e imagen, medicamentos, insulinas y sin ningún problema trabajamos en equipo con él. En estos casos somos un excelente apoyo en la atención del pie diabético', explicó el experto en cuidado y atención avanzada de heridas, Álvarez Trejo.
Atención especializada de pie diabético puede prevenir amputaciones
Aproximadamente el 85% de nuestros pacientes no se ha realizado una amputación completa de la extremidad. Sin embargo, este porcentaje depende de las características propias de cada caso
Rebeca Flores
11 de junio 2019. 1:50 pm