Cada vez incrementa más el número de pacientes crónicos complejos. Estos se caracterizan por padecer varias enfermedades crónicas, limitantes y progresivas, y asociados a la sobreutilización de los servicios de salud, la polifarmacia y el deterioro funcional, además de los factores socio-familiares que condicionan la…
Cada vez incrementa más el número de pacientes crónicos complejos. Estos se caracterizan por padecer varias enfermedades crónicas, limitantes y progresivas, y asociados a la sobreutilización de los servicios de salud, la polifarmacia y el deterioro funcional, además de los factores socio-familiares que condicionan la complejidad en su atención.
Así se ha hecho saber por la Sociedad Española de Medicina Interna (SEMI), durante su VI Reunión de Pacientes Crónicos Complejos. En concreto, se han ofrecido datos como que un 5 por ciento de estos pacientes crónicos complejos suponen casi la mitad del consumo de hospitalización urgente y son los que generan la mayor proporción de ingresos urgentes o no programados en los hospitales.
La cuestión de fondo, como aportaba, Ignacio Vallejo, coordinador del Grupo del Paciente Pluripatológico y Edad Avanzada de la SEMI, es que “las hospitalizaciones evitables afectan más a los pacientes ancianos, por su fragilidad y por su carga de enfermedades crónicas, siendo más frecuentes en algunas áreas sanitarias que en otras”.
Así, cada vez más hospitales están implantando programas específicos para estos pacientes crónicos. Un ejemplo de ello es el Hospital Miguel Servet de Zaragoza, que ha puesto en marcha la Unidad del Paciente Crónico Complejo con un hospital de día y una consultas específica para estos pacientes, en el marco del Programa de Atención al Paciente Crónico Complejo de Aragón, y que está previsto que se extienda por otros hospitales y centros sanitarios de la comunidad aragonesa.
Las patologías más recurrentes
En cuanto a cuáles son las patologías que más preocupan a este respecto, la insuficiencia cardiaca y la demencia o deterioro cognitivo son dos de las enfermedades crónicas, progresivas e incapacitantes que más padecen los pacientes crónicos complejos, ya que aumentan con la edad de manera exponencial.
Sobre esta cuestión, doctor Jesús Díez Manglano, vicepresidente segundo de la SEMI, aportaba datos como que 'la insuficiencia cardiaca afecta a un 2 por ciento de la población general, incluidos niños, pero si el grupo de edad lo reducimos a personas mayores de unos 80 años, el porcentaje aumenta hasta el 10 por ciento, limitando en estos pacientes la calidad para respirar y aumentando el cansancio y la hinchazón en las extremidades”.
También la diabetes es una enfermedad muy relacionada con el envejecimiento, ya que más de un tercio de la población mayor de 75 la padece. “En el paciente anciano tiene sus particularidades en relación a su control y tratamiento, que deben basarse en el estado funcional del paciente por el riesgo de hipoglucemias y por predisponer al desarrollo de fragilidad”, señala el doctor Ignacio Vallejo.
En este sentido, para lograr una mayor eficacia de las Unidades de Medicina Interna con los pacientes crónicos, desde la SEMI apuestan por abordar al paciente desde una visión global, holística, de la enfermedad. “No debemos quedarnos en el aspecto puramente diagnóstico, sino también ver el terapéutico y la situación funcional, social y cognitiva de los pacientes y sus cuidadores”, concluía el vicepresidente segundo de la SEMI.