Según los datos registrados, hay clínicas que han registrado un aumento interanual del 138% de consultas por infertilidad masculina
Los datos recogidos por la Sociedad Española de Fertilidad alertan de un descenso de la calidad del semen de los españoles. El centro médico de reproducción asistida iGin ha comprobado que desde 2016 en sus sedes han aumentado un 138 por ciento las parejas que…
Los datos recogidos por la Sociedad Española de Fertilidad alertan de un
descenso de la calidad del semen de los españoles. El centro médico de reproducción asistida iGin ha comprobado que desde 2016 en sus sedes han
aumentado un 138 por ciento las parejas que recurren a tratamientos de reproducción por motivos exclusivos de infertilidad masculina.
Uno de los problemas, según los expertos, es que
cada año disminuye la calidad del semen de los españoles. Desde Fertilab Barcelona avisan que el resultado ideal en un seminograma es aquel que muestra
más de 15 millones de espermatozoides por mililitro. Igualmente con al menos el 32 por ciento de ellos con movimiento progresivo y al menos que el 4 por ciento de estos no presenten deformaciones.
El tabú de la infertilidad masculina
La infertilidad es una patología reconocida por la OMS y se calcula que,
solo en España, afecta a una de casa seis parejas. Federica Moffa, de Fertilab Barcelona, explica que existe “una falsa creencia o mito extendido en nuestra sociedad” que nos dice que el origen de la infertilidad en la pareja reside en la mujer. En contraste hay un gran tabú en torno a la infertilidad masculina. “Esto provoca que
entre el 40 y el 50 por ciento de los casos de infertilidad masculina se puedan llegar a desconocer”.
Aún así, entre las causas conocidas más recurrentes se encuentran los
trastornos o traumas existentes en los testículos y la zona genital. También problemas con el esperma, trastornos hipotalámicos o pituitarios.
Al contrario que pasa con las causas de la infertilidad masculina, la mujer siempre ha tenido que cargar con el estigma social de la infertilidad al ser ellas las que se embarazan y paren. “Aún existe la opinión que si no hay embarazo es porque la mujer no es fértil. Esto ha propiciado que haya habido históricamente un mayor interés en el estudio de la fertilidad femenina, en detrimento de la parte masculina”, explican desde Fertilab Barcelona.