El resultado abre un nuevo campo de investigación para explorar el potencial clínico de la alteración de la flora microbiana intestinal
24 de enero 2013. 5:44 pm
Expertos del Hospital para Niños Enfermos (SickKids) de Canadá tras han realizado un estudio de este proceso en modelos experimentales, demostrando que las bacterias del intestino podrían proteger de enfermedades como esclerosis múltiple, artritis reumatoide o lupus y además han descubierto que la mujer podría…
Expertos del Hospital para Niños Enfermos (SickKids) de Canadá tras han realizado un estudio de este proceso en modelos experimentales, demostrando que las bacterias del intestino podrían proteger de enfermedades como esclerosis múltiple, artritis reumatoide o lupus y además han descubierto que la mujer podría estar 'en mayor riesgo' que el hombre de padecer este tipo de enfermedades. Los resultados aparecen publicados en la edición online de la revista Science
En concreto, los investigadores han atestiguado que cuando se administró bacterias intestinales de individuos macho a individuos hembra con riesgo de diabetes, éstas estuvieron 'fuertemente protegidas contra la enfermedad al aumentar sus niveles de testosterona'. El modelo hembra presentaba un 85 por ciento de posibilidades de desarrollar diabetes, porcentaje que se reduce al 25 por ciento con las bacterias de los machos.
Este hallazgo sugiere posibles estrategias para el uso de bacterias normales del intestino para bloquear la progresión de la diabetes dependiente de insulina en niños que tienen alto riesgo genético, sintetiza la autora principal de este estudio especialista en Biología Genética y Genoma de SickKids, la doctora Jayne Danska.
Una posible explicación al hecho de que las bacterias del tracto gastrointestinal protejan contra las enfermedades autoinmunes la encuentra Danska en 'la hipótesis de la higiene'. Así, indica que el aumento 'espectacular' de estas patologías en los últimos 50 años se asocia 'a los cambios en la exposición a los microbios'.
Por último, y en relación a lo anterior, pone como ejemplo los casos de los niños que viven en granjas. Éstos están expuestos a un ambiente microbiano más denso y más complejo, pero 'tienen menos enfermedades autoinmunes', concluye.