Los retos que resolver del Sistema Nacional de Salud del siglo XXI han sido abordados por José Javier Castrodeza, secretario general de Sanidad y Consumo del Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad, en las jornadas organizadas por la Cátedra de Gestión Sanitaria y Ciencias de la Salud de la Universidad a Distancia de Madrid (Udima). Entre otras reivindicaciones, ha pedido 'una mayor lealtad institucional y aplicación práctica de los acuerdos suscritos en el Consejo Interterritorial', así como 'corregir la falta de estabilidad laboral, que afecta a un 30 por ciento de los profesionales sanitarios y que no colabora a conseguir la complicidad de los trabajadores'.
El secretario general de Sanidad se ha referido a la financiación como uno de los 'retos relevantes' del sistema para los próximos años, y ha recordado que la sanidad 'es una prestación no contributiva financiada vía impuestos, no finalista e incluida en la dotación general otorgada a las CC.AA, que deciden qué prioridad dan a la consolidación y al desarrollo de la sanidad'.
Frente a la posibilidad de que la financiación sea finalista, Castrodeza ha defendido 'un presupuesto suficiente, adecuado a las necesidades, y que garantice la cantidad y calidad de los servicios prestados. El dinero debe seguir al paciente'.
También se ha referido a los profesionales, 'principal activo del SNS', y ha recalcado que 'sin su aplicación y su dedicación, el modelo no avanzaría'. 'La tendencia hacia un sistema sociosanitario ha de ser asumida y liderada por los profesionales. Su esfuerzo ha de ser compensado por un buen sistema de incentivos, alineado con los objetivos generales del sistema y capaz de estimular con mejoras en retribución, promoción, movilidad y nuevas responsabilidades'. Aparte de la necesidad de 'corregir la falta de estabilidad laboral', Castrodeza ha dicho que debe haber una 'actualización continuada de los acuerdos marco y mejoras en la gestión y planificación de la troncalidad y la creación del registro estatal de profesionales'.
Aprovisionamiento y compras centralizadas
José Julián Díaz Melguizo, director general del Instituto Nacional de Gestión Sanitaria (Ingesa), también ha participado en las 'Jornadas de Actualización en Gestión Sanitaria', organizadas por la Udima. En su intervención, ha analizado el aprovisionamiento en la sostenibilidad del SNS, así como las características principales de la plataforma de compras centralizadas. De este modelo ha destacado la utilización de la figura del acuerdo marco, y ha recalcado que no es exclusivo ni excluyente. Las licitaciones se realizan por producto y por principio activo en medicamentos, no por indicación. 'El único criterio de selección es el clínico', ha señalado.
Los principales beneficios del modelo centralizado, a su juicio, son su contribución al establecimiento de estándares de calidad comunes en todo el SNS, con lo que se mejora la calidad y la cohesión. Además, genera ahorros al conseguir un incremento de la eficiencia y la estabilidad presupuestaria del sistema sanitario público en sus adquisiciones.
Otra ventaja del modelo centralizado es que permite la introducción de innovación tecnológica en el SNS. Además, consigue una mayor eficiencia administrativa al disminuir el coste de los procesos gracias a la unificación de criterios. Todas estas gestiones se realizan con 'una mayor transparencia', ha resaltado Díaz Melguizo.