Acaba de celebrarse la Reunión Anual del Grupo Español de Linfomas y Trasplante Autólogo de Médula Ósea (GELTAMO), donde se han repasado los estudios retrospectivos y ensayos clínicos que este grupo cooperativo de la Sociedad Española de Hematología y Hemoterapia (SEHH) tiene en marcha. Entre los primeros, 'destaca una serie de casi 2.000 pacientes con linfoma folicular que se ha convertido en plataforma de referencia para la realización de varias investigaciones, tanto clínicas como traslacionales', ha explicado el doctor Armando López Guillermo, hematólogo del Hospital Clínic de Barcelona y presidente del Comité Científico de GELTAMO. 'Todos son el resultado de diferentes colaboraciones entre centros españoles y los grupos europeos más prestigiosos del European Lymphoma Institute'.
Entre los ensayos clínicos que van a ponerse en marcha en 2017, el experto ha destacado dos en linfoma del manto (una de las variantes más agresivas de la enfermedad), uno en linfoma de células grandes (con nuevos fármacos) y otro en linfoma de Hodgkin.
'Los avances en el abordaje de los linfomas vienen siendo muy numerosos y relevantes, tanto en los aspectos biológicos de investigación básica como en los nuevos tratamientos, pero es quizás en el linfoma del manto y en los linfomas difusos de células grandes, donde se han producido más novedades en el último año', ha explicado López Guillermo. 'En estos tipos se están utilizando varios fármacos diana, muchos de ellos todavía en investigación', añade.
Uno de los asuntos estrella de la reunión fue el papel del trasplante de progenitores hematopoyéticos (denominado genéricamente como trasplante de médula ósea) en el abordaje del linfoma de Hodgkin. 'El uso de esta técnica ha disminuido con el uso de los nuevos fármacos dirigidos, pero sigue teniendo relevancia en el momento actual', afirma el experto.
Con respecto al tratamiento post-trasplante de los linfomas en general, 'es preciso disminuir (o eliminar) el tratamiento inmunosupresor inmediatamente después del trasplante e implementar algún tratamiento antilinfomatoso'. En este contexto, 'es clave el anticuerpo monoclonal antiCD20, aunque en ocasiones se hace imprescindible usar quimioterapia', afirma.
GELTAMO también tiene una vertiente docente, además de clínica. En este sentido, el experto se ha referido al programa educacional de la reunión y, sobre todo, a la producción de guías de práctica clínica para el abordaje de los diferentes tipos de linfoma y al registro de linfomas de los hospitales de GELTAMO.
