Con el objetivo de conocer las últimas actualizaciones y novedades de las guías de asma y EPOC, un centenar de médicos se dio cita en las
VI Jornada de Patología Respiratoria organizada por la Sociedad Valenciana de Médicos Generales y de Familia (SEMG Valencia). En las mismas se puso de manifiesto la importancia de la
patología respiratoria entre los pacientes de Primaria.
No obstante, en torno al
30 por ciento de los pacientes de Primaria presenta síntomas o enfermedades respiratorias. Una de las enfermedades más prevalentes es el
asma. Esta afecta a un 5 por ciento de la población y aproximadamente a 10 o 12 por ciento de los niños. Otra de las patologías que suelen ser habituales en las consultas del primer nivel asistencial es la
enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC). La misma afecta al 10,2 por ciento de la población general entre los 40 y los 80 años. Además, presentando una elevada morbimortalidad. Por ello, es necesario que los médicos de familia estén familiarizados y actualicen sus conocimientos en estas patologías.
Patología respiratoria en los pacientes de Primaria
Según se puso de manifiesto durante la Jornada, la EPOC es una enfermedad que presenta una alta prevalencia en la población española (11,8 por ciento) y una elevada tasa de infradiagnóstico (74,7 por ciento) según datos del
estudio Episcan II. Además, el diagnóstico es complicado porque debe de realizarse una espirometría con prueba broncodilatadora.
Uno de los temas a abordar sobre patología respiratoria en los pacientes de Primaria era la necesidad de un cribado en patologías respiratorias frecuentes. Este es el caso de la EPOC. A este respecto, los organizadores de la jornada señalan que “es importante llegar en fases tempranas de la enfermedad, porque es cuando realmente podemos hacer mucho más por nuestros pacientes”. En concreto, a la hora de preservar su función pulmonar, la calidad de vida, motivación para dejar de fumar y realizar intervenciones precoces en exacerbaciones”. Para conseguirlo los médicos tienen a su disposición
herramientas para el cribado en pacientes con hábito tabáquico, como es el dispositivo COPD-6 y COPD-PS.
Del mismo modo, existe una serie de barreras en el diagnóstico por parte del paciente. Por ejemplo, el escaso conocimiento de la enfermedad, el miedo a otros diagnósticos, excusa o adaptación a los síntomas; así como otros obstáculos a nivel profesional, como son el escaso tiempo en la consulta o los problemas con la espirometría.