En el 2016 se han cumplido 10 años desde que la herramienta quirúrgica Da Vinci llegó a México y realizó su primera cirugía tratándose de un procedimiento de banda gástrica en un paciente con un Índice de Masa Corporal mayor de 60.
En entrevista exclusiva para EL MÉDICO INTERACTIVO, el doctor Carlos Vásquez Lastra, médico adscrito del Hospital ABC, encargado del Área de Urología, comenta con nosotros cuáles son las aplicaciones de la cirugía robótica en la actualidad.
Los procedimientos más comunes que se realizan van desde el área oncológica para retirar tumores sin dañar órganos o zonas sanas, ginecológicas, cardiacas y por su puesto urológicas.
El doctor Vásquez Lastra ha utilizado Da Vinci en casos de cáncer prostático muy avanzado para practicar prostatectomía radical en la cual, como su nombre lo dice, se retira la próstata y los ganglios para evitar recaídas.
Entre las grandes ventajas que traen las cirugías de mínima invasión están la rigurosa precisión y el rango de movilidad, que asegura es mejor que el de la mano humana pues, el cirujano puede ayudarse con sus cuatro brazos robóticos que funcionan de manera independiente, además la visión se ve beneficiada ya que se observa la zona de la cirugía a detalle.
Los movimientos que realiza la herramienta robótica son determinados como finos, es decir, que se puede reducir drásticamente el área de trabajo a un área muy pequeña, por lo tanto las incisiones son mínimas lo que ayuda a la pronta recuperación del paciente, en el caso del cáncer permite la preservación otras estructuras sanas cercanas al tumor.
Los resultados de la cirugía robótica van desde menos dolor, menos tiempo de recuperación, por lo tanto el paciente requiere menos tiempo para la reinserción a sus labores cotidianas, además de reducir el sangrado, lo que mantiene la presión arterial estable durante el procedimiento y reduce la necesidad de alguna transfusión, por lo tanto reducir riesgo de infecciones.
La probabilidad de que los cánceres comunes puedan reaparecer después de haber retirado la tumoración es de menos del 1%, en casos específicos en los cuales el cáncer haya invadido algunas otras estructuras, estas deberán ser retiradas.
En el cáncer de próstata la radioterapia o radiación local, además de complementar el bloqueo hormonal es decir de bloquear la testosterona, sustancia que facilita la aparición del cáncer, lo que provoca una andropausia química misma que produce síntomas que pueden relacionarse a la menopausia en mujeres, con síntomas como bochornos, dolor en los pechos, descalcificación, aumento de peso, entre otros, comentó el especialista.
En el caso del riñón solo puede curarse cuando se retira a tiempo de un tamaño pequeño, en caso de haber salido del rango o en caso de invadir otras estructuras se procede a tratar otros tratamientos que aunque no son tan efectivos, puede realizarse otra cirugía. En cualquiera de los casos mencionados puede ser necesario que se recurra a la quimioterapia para dar seguimiento a la disminución del cáncer, sin embargo, eso dependerá de cada paciente.