La presidenta del Colegio Oficial de Médicos de Valencia (COMV), Rosa Fuster, va a remitir una carta al consejero de Sanidad, Manuel Llombart, para que explique 'quién y con qué criterios' va a determinar qué medico es 'valioso' para el sistema y permitirle así retrasar su jubilación hasta los 70 años. Fuster se ha referido así al Plan de Ordenación de Recursos Humanos que prepara la Consejería de Sanidad que permitirá, según avanzó Llombart, a los médicos de 'valor añadido' retrasar su jubilación de los 65 a los 70 años.
Al respecto, ha lamentado que se quiera jubilar de forma 'forzosa' a todos los médicos a los 65 años por regla general, cuando si un profesional 'no se encuentra en condiciones' será 'el primero que no querrá continuar'. Así, ha señalado que es 'una lectura poco clara' que el criterio para permitir que sigan trabajando hasta los 70 años es que sea considerado 'valioso'. 'Cuál va ser el criterio objetivo y quién va a determinarlo', ha cuestionado.
Por otra parte, ha avanzado que en esta misiva también aprovechará para pedirle que en los concursos de traslados y oposiciones tengan la misma baremación los médicos que trabajan directamente para la Agencia Valenciana de Salud (AVS) que quienes ejercen su labor para la Sanidad pública pero en un hospital de gestión privada ya que 'atiende al mismo tipo de pacientes'.
Así, ha señalado que ante la cada vez mayor coexistencia de hospitales concertados y de gestión pública y privada se está debatiendo en todas las comunidades la baremación por año trabajado de los profesionales según el tipo de centro en el que haya ejercido. 'No tiene sentido que un médico que trabaje en el Hospital de Alzira, de gestión privada, tenga menos puntos que el que ejerce en el Hospital de Xàtiva', ha constatado.
Por último, se ha mostrado favorable, ya a título personal, a la propuesta de la ministra de Sanidad, Ana Mato, de elevar a 16 años la edad de consentimiento sexual ya que considera que una niña a los trece años 'no tiene capacidad de saber qué son las relaciones sexuales consentidas, ni tiene preparación ni información'.
Al respecto, ha explicado que aunque un médico está 'capacitado' para 'observar' la madurez de una niña 'no se puede dejar a su arbitrio' ya que 'puede ser engañado'. Por ello, ha señalado que su parecer personal, ya que entre el colectivo hay diversas opiniones, es que la edad de 16 años es 'correcta' para pensar qué la niña tiene madurez.