Coca-Cola Iberia ha presentado su nuevo enfoque estratégico para los próximos años, centrándose en la reducción del azúcar de sus bebidas. 'Los consumidores están cada vez más preocupados por su salud, por el consumo de azúcar', explica Pelayo Bezanilla, director de Comunicación y Asuntos Públicos de Coca-Cola Iberia.
Por ello, la compañía destaca que han reducido en un 38 por ciento el contenido de azúcar por litro en sus bebidas desde 2000 y prevé conseguir otro 12 por ciento desde 2017 hasta 2020. En esta línea, 'apoyamos las recomendaciones de la Organización Mundial de la Salud de reducir por debajo del 10 por ciento el aporte de calorías que provengan del azúcar', señala Rafael Urrialde, director de Nutrición y Salud de Coca-Cola Iberia.
Asimismo, la empresa incide en que todas sus bebidas cuentan con una alternativa sin azúcar. 'Fanta, por ejemplo, ha reducido el azúcar en un 30 por ciento y Sprite, en un 80 por ciento', especifica Urrialde. En la actualidad, las ventas de bebidas sin azúcares de Coca-Cola superan el 40 por ciento. Los productos sin azúcares añadidos crecieron un 4 por ciento en 2016, lideradas por Coca-Cola Zero, que se expandió por encima del 12 por ciento, según datos de la compañía.
Etiquetado y envases
Por su parte, Juan José Litrán, director de Relaciones Corporativas, ha incidido en que otra novedad es el lanzamiento de nuevas latas, de 250 ml, un poco más pequeñas que las actuales de 330 ml, ya que, de nuevo, los consumidores exigen menos cantidad para mejorar sus hábitos de consumo hacia un consumo más saludable.
Por último, la compañía ha hecho hincapié en que su estrategia también va dirigida a impulsar un etiquetado claro con, por ejemplo, comunicar visualmente el contenido de raciones que hay en cada envase, y su apuesta por no realizar publicidad dirigida a menores de 12 años.
