Los Colegios de Médicos gallegos piden estrategias de prevención de problemas vinculados al PAIME

'En el periodo MIR deben implementarse, desde las Unidades Docentes, estrategias de prevención de problemas vinculados al PAIME'. Ésta es una de las conclusiones de la IV Jornada Autonómica dedicada al Programa de Atención Integral del Médico Enfermo (PAIME) celebrada recientemente en Ourense con la participación de los cuatro Colegios pronciales.

El Consejo de Colegios de Médicos de Galicia celebró el pasado 18 de marzo, en el Colegio de  Médicos de Ourense, la reunión autonómica anual sobre el Programa de Atención Integral al Médico Enfermo (PAIME), que atiende los problemas de salud de los médicos gallegos que requieren privacidad y que vela desde hace años por aumentar la seguridad asistencial para pacientes y profesionales.  Dicho programa cuenta con el apoyo de la Consejería de Sanidad de la Xunta.

En la jornada estuvieron presentes las juntas directivas de los Colegios Médicos, además de coordinadores del programa de las cuatro provincias, miembros de las Comisiones Deontológicas de dichas corporaciones, junto a representantes de las Unidades de Prevención de Riesgos Laborales del Servicio Gallego de Salud, psiquiatras, terapeutas, comisiones de docencia y gestores del sistema público de salud, entre otros.

La inauguración corrió a cargo de Margarita Prado, directora general de Recursos Humanos del Sergas, y de los doctores José Luís Jiménez, presidente del Consejo Gallego de Colegios de Médicos y José Manuel Bendaña, coordinador PAIME Galicia.

Temas como el MIR frágil, la detección y prevención de conductas suicidas, y el manejo psicoterapéutico de trastornos de la personalidad fueron abordados por diferentes expertos en la materia, y de los cuales se extrajeron una serie de conclusiones.

Entre ellas destaca la ya citada de que en el periodo MIR deben implementarse desde la Unidades Docentes estrategias de prevención de problemas vinculados al PAIME; que el perfil del médico residente frágil puede ser detectado ya en los primeros meses por los tutores y establecer las medidas oportunas para su manejo; y que se hace necesario que tanto desde el pregrado como durante la formación del MIR se establezcan protocolos y pautas para la detección precoz de factores de riesgo y susceptibilidad individual a patología subsidiaria de tratamiento en el PAIME.

Prevención del suicidio y manejo de trastornos de la personalidad

Con respecto al suicido entre el colectivo y otros trastornos psiquiátricos se concluyo que el suicidio y la ideación suicida son fenómenos frecuentes entre los médicos, por lo menos tan frecuentes como en otros profesionales universitarios; las mujeres médicos son una población más vulnerable al suicidio; el estrés laboral como factor precipitante de la depresión, el consumo de sustancias tóxicos y la auto-medicación y la escasa búsqueda de ayuda son factores de riesgo a tener en cuenta; y un programa de tratamiento rápido y confidencial es la mejor manera de abordar esta problemática.

Además, el manejo de los trastornos de la personalidad ha de hacerse desde una perspectiva individual que abarque tanto aspectos farmacológicos como psicoterapéuticos, incluyendo si es preciso internamiento en fases agudas; es especialmente difícil el abordaje de los trastornos de la personalidad en el colectivo médico y en el entorno PAIME; y el código deontológico obliga a todos los médicos: en primer lugar, a proteger la salud de los pacientes y en segundo, a ayudar a los compañeros que no se hallen en condiciones de prestar asistencia y por ello, a comunicar a la institución colegial, de forma confidencial, esta situación.

Como últimas conclusiones, legalmente ha de garantizarse la seguridad de la asistencia prestada, por ello cuando está comprometida debe ponerse en conocimiento de la institución colegial de forma fehaciente para que ésta pueda adoptar las medidas necesarias para proteger, tanto a ésta como al médico comprometido; y ha de adecuarse el presupuesto del programa al gasto real, los dos últimos años han sido notablemente deficitarios; por ello se insiste en que la Consejería de Sanidad actualice su aportación al programa, y en pedir apoyo del Patronato de Acción Social de la OMC.