El Ministerio de Sanidad anunciaba recientemente el modelo para solicitar y de adjudicación de plazas de Formación Sanitaria Especializada. El mismo será exclusivamente de forma telemática y se realizará una adjudicación inmediata. Ante este anuncio se han producido diferentes reacciones de rechazo tanto de colegios…
El Ministerio de Sanidad anunciaba recientemente el modelo para solicitar y de adjudicación de plazas de Formación Sanitaria Especializada. El mismo será exclusivamente de forma telemática y se realizará una adjudicación inmediata. Ante este anuncio se han producido diferentes reacciones de rechazo tanto de colegios como de sindicatos.
Para empezar, la Vocalía MIR del CGCOM pide que el modelo de adjudicación de plazas sea más seguro y en tiempo real. Ofreciendo su colaboración y pidiendo diálogo para recoger el sentir de la profesión médica, explican algunos de los actuales problemas. “De implementar nuevos modelos de adjudicación de plazas, estos deben de presentar las suficientes garantías”, afirman. Asimismo, insisten en que “deben de realizarse de una manera escalonada para evitar que el cambio de paradigma al que vamos encaminados con la digitalización no genere un cisma”. Según los médicos esto podría provocar “situaciones que nos hagan retroceder y generen una desconfianza en el sistema y su gobernanza”.
Asimismo, piden que el Ministerio rectifique, ya que “no es entendible que la transición hacia un modelo de elección telemática no vaya encaminada a una elección en tiempo real”. Además, apuntan que “sería entendible que en esa transición temporal entre el modelo de adjudicación de plazas virtual y el telemático, se articulara un sistema de elección mixto”. Ese permitiría ir perfilando y solucionando los problemas que se vayan produciendo con un menor número de probandos.
En esta línea también se ha manifestado el Foro de la Profesión Médica. Según el mismo, siempre que se deseen realizar cambios en sistemas establecidos deben contar con el respaldo y reconocimiento de la profesión médica. Por ello, estos cambios 'se deben presentar con antelación y garantías suficientes'. Además de implementarse de una manera escalonada, 'para evitar riesgos y desconfianza en el sistema y su gobernanza'.