Medicina Interna detecta hasta 79 comorbilidades asociadas a la EPOC, y así se ha puesto de manifiesto en la
XVI Reunión de la Enfermedad Pulmonar Obstructiva Crónica de la Sociedad Española de Medicina Interna (SEMI) organizada recientemente en Madrid. En el encuentro también se han presentado las novedades de las Guías GOLD 2023 y el libro ‘Comorbilidades en EPOC’.
EPOC en Medicina Interna
El perfil más habitual del paciente EPOC en Medicina Interna es el de un varón de edad avanzada, fumador o exfumador, con varias comorbilidades y polifarmacia, según ha informado SEMI. Más de la mitad de las altas por exarcebación de la EPOC en España se realizan desde los servicios de Medicina Interna. Además,
cada vez ingresan más mujeres con diagnóstico de EPOC. Por el contrario, el perfil menos frecuente en Medicina Interna es el de un “paciente joven (de menos de 50 años), no fumador y con apenas comorbilidades”.
Medicina personalizada
Los especialistas han hablado de la necesidad de desarrollar una Medicina personalizada para tratar al paciente con EPOC, “una enfermedad crónica, compleja y heterogénea”, como la han definido. Por ello, es necesario conocer las comorbilidades asociadas a la EPOC cuando los pacientes están ingresados, no sólo ambulatoriamente.
Comorbilidades asociadas a la EPOC
La depresión y la ansiedad son patologías “extremadamente frecuentes”, sobre todo en fases avanzadas de la enfermedad. SEMI calcula que más del 50 por ciento de los pacientes con EPOC tiene alguna de estos trastornos de salud mental. Otras comorbilidades frecuentes asociadas son
la malnutrición, la disfunción eréctil, los trastornos del sueño, la periodontitis y las alteraciones bucales.
Cabe recordar que el
infradiagnóstico medio de la EPOC en España es superior al 80 por ciento, y que la prevalencia entre la población de 40 a 80 años es del 11,8 por ciento.
Tratamiento farmacológico y no farmacológico
En cuanto al tratamiento, los expertos han apuntado que los antibióticos beta-láctamicos, quinolonas y carbapenémicos son los grupos más utilizados en EPOC.
El internista debe
ajustar el tratamiento farmacológico en fase estable (doble y triple terapia no broncodilatadora). Igualmente, puede aconsejar al paciente respecto a terapias no farmacológicas, como la rehabilitación-fisioterapia respiratoria o el abordaje nutricional.
“Los internistas jugamos un papel fundamental en la atención del paciente con EPOC, especialmente en fases avanzadas”, han indicado los especialistas. A modo de conclusión, han apuntado entre sus funciones que deben tener un papel más activo, sobre todo en la búsqueda de comorbilidades y su tratamiento.