El éxito de un programa de vacunación depende de muchos factores que van desde la investigación clínica, la fabricación, la distribución a todo el mundo y la aplicación a la población través de los sistemas de salud de cada nación y consultorios médicos. De esta forma se logra que la inmunización evite entre 2 a 3 millones de muertes cada año, según la Organización Mundial de la Salud (OMS).
La mayor parte de las vacunas son fabricadas en Estados Unidos y en países de Europa como Francia, Alemania y Gran Bretaña. Desde ahí llegan a México a través de vuelos de carga donde es importante mantener sus condiciones óptimas para que no sufran cambios que puedan afectar su eficacia y seguridad.
Por ser productos muy delicados en su manejo, su traslado está regulado por el Acuerdo Internacional de Mercancías Perecederas (ATP) que establece las normas que aseguran las condiciones óptimas para su aplicación y establece los tipos de vehículos que se deben utilizar, de acuerdo con las características de cada tipo de vacunas para evitar que se vean afectadas en su valor.
Se deben garantizar las condiciones de conservación como son mantenimiento de la cadena de frío en el proceso de transporte, conservación óptima de temperatura y luz, manipulación y almacenamiento, garantizando en todo momento la inmunogenicidad y la eficacia de los valores desde la salida de las instalaciones del fabricante.
En México, Grupo AAACESA es el primer y único almacén fiscalizado dentro del Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (AICM) que cuenta con una licencia sanitaria emitida por la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris) para el manejo de vacunas, medicamentos y productos biológicos que requieren operaciones de cadena de frío.
La cadena de frío es una parte de la cadena de suministro de temperatura controlada que debe mantenerse intacta y garantiza al consumidor que el producto que recibe no ha salido, en ningún momento, del rango de temperatura que requiere, asegura el director general del Grupo AAACESA, Gustavo Déctor García.
Se debe cumplir la NOM-059SSA1-2015 “Buenas prácticas de Fabricación de Medicamentos”, con clasificación autorizada para almacén de depósito y distribución de medicamentos y productos biológicos para uso humano, así como comercio de productos farmacéuticos (con manejo de medicamentos biológicos).
Esta empresa cuenta con alrededor de 9 mil metros cúbicos para el almacenamiento de productos en cadena de frío de los cuales alrededor del 50% están destinados al resguardo de medicamentos y productos farmacéuticos cuyas cámaras de refrigeración van de 2 a 8 grados centígrados, de congelación de menos 25 a menos 10 grados centígrados, así como de temperatura controlada de 15 grados centígrados a 25 grados centígrados.
La trazabilidad y ubicación en tiempo real con el apoyo de tecnología de radiofrecuencia permite establecer un registro tanto de la ubicación como de la temperatura de la carga por pallet, en tiempo real, a través de un monitoreo activo y automatizado de temperatura “end to end” 24/7 para las mercancías de cadena de frío.
Correcta preservación de vacunas asegura inmunización efectiva
La temperatura ideal para su correcta preservación varía entre los 2 y 8ºC, por lo cual se requieren equipos y almacenes especializados en su adecuado manejo y cuidado
Rebeca Flores
12 de julio 2019. 1:25 pm