En la actualidad, al menos dos millones de mexicanos sufren epilepsia, padecimiento neurológico que provoca ataques repentinos, algunas veces violentos, causados por actividad eléctrica cerebral anormal. Esta enfermedad ataca a hombres y mujeres por igual, y puede aparecer en cualquier etapa de la vida según datos de la Organización Mundial de la Salud.
Con el objetivo de dar atención especializada en todas las etapas de vida de las personas que padecen epilepsia se creó el Centro Aura que reúne a diversos especialistas en neurología con subespecialidad en Epileptología clínica, Neurología pediátrica, Neurofisiología, Neuropsiquiatría, Neurocirugía y Neuropsicología.
En México no hay más de 30 epileptólogos, de los cuales cinco se encuentran en esta clínica.
A nivel nacional se estima que solo la mitad de los pacientes diagnosticados llevan un tratamiento adecuado de la enfermedad, pues no solo se manifiestan con convulsiones, también con trastornos conductuales como hiperactividad o depresión.
La doctora Rossana Huerta Albarrán asegura que la epilepsia puede detectarse desde recién nacidos a través de 'crisis sutiles' que pueden identificarse como chupeteo o espasmos de manos o piernas; sin embargo, su detección depende del acceso a la información de los padres y de la observación.
Muchos de los casos de epilepsia en edad escolar son confundidos con otros trastornos conductuales como el de déficit de atención o ansiedad, por lo tanto las conductas oposicionistas o desafiantes podrían no ser tan simples.
La médico cirujano Daruni Vázquez Barrón, con subespecialidad en Neurocirugía funcional, Estereotaxia y Radiocirugía, explicó que el padecimiento puede ser tratado mediante cirugía, pues aunque las estructuras pueden parecer normales, el funcionamiento es inadecuado.
También se utilizarán las terapias de implantación de sistemas de estimulación eléctrica además de que algunos casos pueden ser candidatos a ablación o resección, es decir, a retirar el sitio donde se originan las crisis.
La maestra neuropsicóloga Montserrat Gómez, quien además es paciente con epilepsia, agregó que la evaluación integral que se ofrece en el Centro Aura es clave, toda vez que también se revisan las funciones cognoscitivas que presenta el paciente, por medio del electro-encefalograma o video electro-encefalograma.
Los expertos reiteraron que las personas con epilepsia pueden tener una vida normal, debido a que este padecimiento no es una limitante para su desarrollo emocional, laboral, escolar y deportivo.