Según un estudio de la Fundación Pfizer y Fad Juventud: “el 79,9 por ciento de las personas jóvenes afirma que está más informado/a sobre su salud y bienestar gracias a la utilización de apps y herramientas digitales y el 77 por ciento afirma que su uso les ayuda a cumplir ciertos hábitos y rutinas”. Pese a ello es patente que
existe mucha desinformación sobre salud en el entorno digital. Por ello, los profesionales sanitarios deben tener un rol al respecto.
En este contexto, en la novena jornada de debate de “En Código Médico”, que organiza la Comisión de Deontología del
ICOMEM, se ha analizado el papel de los médicos en el ámbito de la comunicación y las redes sociales. Rafael del Río, presidente de la Comisión de Deontología, ha clausurado el acto, cuyas conclusiones se darán a conocer a todos los colegiados a través de
un documento de posicionamiento.
Como insistía el experto” la presencia de las cuestiones de salud en los medios es principalmente reflejo de la demanda de la sociedad. Es por ello una gran oportunidad para la realización de
tareas de educación y concienciación que podrían tener mucho impacto. Precisamente por eso también, son un ámbito que debe ser protegido para que cumpla la función social que les corresponde. Aquí los médicos tenemos mucho que ofrecer y creemos que esta es
una de las contribuciones más valiosas que podemos aportar actualmente”.
Desinformación en salud
Al respecto del problema de la desinformación en temas relacionados con la salud, intervenía Monica Lalanda, médica, comunicadora, bioeticista. “Es esencial que los médicos mantengan la profesionalidad y consideren cuidadosamente la manera en que difunden información, así como la confidencialidad de sus pacientes”.
Pese a ello, el uso de redes y la desinformación y bulos en salud, son un tema por desarrollar más en profundidad en ámbitos deontológicos. “El nuevo código es insuficiente en esta materia y
sería preciso incorporar más ejemplos y pautas específicas”, insistía Lalanda. En la actualidad, es poco común encontrar un médico que no haga uso de las redes sociales. Sin embargo, “es importante que los facultativos las utilicen de manera ética y profesional. También es necesario que los médicos aborden valientemente asuntos éticos en redes sociales y medios de comunicación”, concluía la experta.