México es amenazado por la obesidad. El problema ha llegado a definirse como una epidemia que necesita ser tratada de manera inmediata, pues a nivel mundial nos encontramos en el lugar número uno de los países con sobrepeso.
En entrevista exclusiva para EL MÉDICO INTERACTIVO MÉXICO, las doctoras Denise SanJuan González y Haydeé Llamas Hernández, médicos generales y expertas a nivel nacional por la Asociación Mexicana Estudio de la Obesidad (AMEO) y nivel Latinoamérica por el Instituto Latinoamericano de Sobrepeso y Obesidad (ILSO), nos cuentan cómo ayudar a superar esta enfermedad.
Encontrar todas las enfermedades que tiene el paciente a causa de la obesidad, que muchas veces las desconoce y de esta manera concientizarlo de todos los problemas que se asocian y enseñarles a adoptar a los buenos hábitos.
El tratamiento consiste en aprender a programar los horarios, el plato del buen comer, a partir de sus resultados se evalúa la posibilidad de usar fármacos que pueden ser anorexigénicos que actúan a nivel central, termogénicos para el metabolismo y saciogénicos que dan un estímulo de saciedad.
Entre las enfermedades relacionadas con el sobrepeso y la obesidad se encuentran padecimientos del hipotálamo, descompensaciones endócrinas, Síndrome de Ovario Poliquístico, climaterio, dislipidemias, hipertensión, taquicardias, etcétera, de las cuales los pacientes deben ser tratados.
El tratamiento necesita de un seguimiento riguroso, compartió la doctora Llamas Hernández, pues el paciente tiene la idea errónea de que dejar de comer le ayudará a bajar de peso cuando lo que necesitan es adoptar nuevos hábitos de alimentación.
Como todo medicamento su uso contrae efectos secundarios que pueden variar de persona a persona, sin embargo se ha evaluado que el beneficio supera los efectos secundarios veinte veces a uno.
La doctora San Juan aseguró que la atención psicológica es un gran paso para el tratamiento de la obesidad, pues gran cantidad de los casos están relacionados con problemas de ansiedad o depresión que lleva al paciente a refugiarse en los alimentos.
El tratamiento debe ser completamente personalizado y este depende de la historia clínica y del estado de cada metabolismo, pues si el paciente sufre de alguna descompensación, por ejemplo de lípidos, esta afectará sus niveles de glucosa, por tanto, en necesario compensar al paciente antes de empezar con algún tratamiento.