¿Cuáles son los principales tipos de dolor que tratan en la unidad de dolor en la que usted trabaja?
En nuestra unidad, la afluencia de pacientes es muy diversa, pues viene dada por la enfermedad de base, suelen ser su mayor incidencia de tipo neuropático, aunque también recibimos pacientes con dolor somático o visceral.
¿Cuál es su valoración sobre el seguimiento de enfermería en los pacientes con dolor crónico?
En las unidades del dolor, la enfermería constituye el puente entre el paciente, la familia y el resto del equipo asistencial, y como miembro de este equipo debe contar con las funciones específicas de programación, coordinación, asistencial y docente. Así, entre otras, destaca reforzar los autocuidados del paciente, ayudar en la interpretación para la correcta administración de su medicación, así como la valoración de los efectos positivos y adversos de esta.
¿Cuál es su experiencia con los tratamientos tópicos?
Los que llevamos muchos años dedicados al tratamiento del dolor, en mi caso 32, hemos visto muchas depresiones, amputaciones e incluso algún suicidio derivado de pacientes con dolor neuropático y alodinia, padecimientos extremadamente difíciles de tratar y controlar.
En la actualidad y desde hace 8 años disponemos de los apósitos de lidocaína y los parches de capsaicina al 8%. En mi experiencia, los resultados son muy buenos tanto para la hiperalgesia como para la alodinia, devolviendo al paciente a su vida normal y laboral.
Dentro de los cuidados en tratamiento del dolor ¿cuáles son las técnicas intervencionistas más frecuentes realizadas por enfermería?
Cargas de sistemas de perfusión intratecal (bombas), seguimiento de pacientes con sistemas de estimulación medular o periférica (EEM o EEP), así como la valoración de los resultados en el caso de la iontoforesis, la estimulación eléctrica transcutánea (TENS), la administración de medicación tópica de uso hospitalario (capsaicina 8 %), la realización de las curas postimplantes o las perfusiones de fármacos.
¿Cuál es su opinión sobre la formación de la enfermería en las unidades de dolor?
En mi opinión la enfermería en estas unidades está bastante motivada por su formación, estar al día es imprescindible para el desarrollo de nuestro trabajo. Creo que dado que el dolor es el principal motivo por el que un paciente acude a consulta, debería existir tanto en Medicina como en Enfermería la asignatura del dolor.
¿Qué porcentaje de pacientes hay en tratamiento en las unidades de dolor según el sexo?
Basado en la evidencia, el porcentaje sería un 65% mujeres, un 30% hombres. Hay que destacar también que hay un 5% de niños
¿Hay interrelación entre enfermería de otras especialidades en las unidades de dolor?
La comunicación de enfermería con otras especialidades en bastante fluida y participativa, dado que el dolor para la enfermería es muy importante en los cuidados y atención a sus pacientes.
"Debería existir tanto en Medicina como en Enfermería la asignatura del dolor"
Desde 1960, año en el que se fundó la primera Unidad de Tratamiento de Dolor, han ido proliferando en todo el mundo. En España, en los últimos 30 años bajo la supervisión de la Sociedad Española del Dolor, se han ido desarrollando, estableciéndose los requisitos básicos y mínimos para su creación y organización, cartera de servicios y distribución geográfica con el objetivo de mejorar la atención de la población. Hablamos con José Antonio Yáñez, de la Unidad de Dolor del Hospital Carlos Haya de Málaga
Enrique G. Jordá
21 de agosto 2017. 1:42 pm