El diagnóstico oportuno, así como el desabasto de medicamentos y una mayor empatía de los médicos hacia los pacientes con cáncer, son algunos de los retos que enfrenta el sector salud en México. Así lo explicó Juana Ramírez, fundadora y Ceo de Grupo Sohin y actual presidenta del Comité Directivo de
Atrys en México.
En entrevista con
El Médico Interactivo México, Ramírez recordó que en el país el diagnóstico del cáncer se hace mayoritariamente en etapas avanzadas. Refirió que más del 60 por ciento de los pacientes de cáncer son diagnosticados en etapas avanzadas, lo que tiene consecuencias para el paciente y para el sistema de salud.
“Cuando el cáncer se detecta en etapas avanzadas, las posibilidades de cura se limitan, además de que los costos de atención de estos pacientes se incrementan”, dijo.
Por otro lado, aseguró que, en los últimos cuatro años, se ha visto un desabasto considerable de medicamentos para atender a estos pacientes de cáncer. Lo anterior derivado de las disposiciones en materia de adquisición de medicamentos para instituciones públicas, que no han podido normalizar el desabasto necesario para sus tratamientos.
Y también por los impactos que a nivel global se tuvo por la pandemia, que hicieron que se generara un rezago importante en la atención de los pacientes oncológicos.
“Estamos primero ante la necesidad de atender el diagnóstico oportuno y la prevención relacionada con estos padecimientos, donde hay mucho por hacer”, afirmó.
Responsabilidad individual sobre la salud
La especialista añadió que otro de los retos está en que hace falta una mayor cultura en torno de la responsabilidad individual sobre la salud.
“No es un secreto que tenemos una verdadera epidemia de obesidad y está certificadamente demostrado que más de 10 tipos de cáncer están relacionados con la obesidad directamente”, explicó.
De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS), el 70 por ciento de la población mexicana tiene algún índice de obesidad, lo que hace que uno de cada 10 mexicanos tendrá
un diagnóstico de cáncer a lo largo de la vida.
“Así que hacer un trabajo incremental de diagnóstico oportuno y prevención es una de las necesidades, además de seguir trabajando en la democratización del servicio a la salud”, dijo.
Presupuesto limitado para tratamientos de cáncer
Juana Ramírez aseguró que los costos en medicamentos para un adecuado tratamiento también es un tema que limita la atención oncológica en México. “Si bien es cierto que más del 83 por ciento de las compras que se hacen hoy en el sector público corresponden a medicamentos genéricos y muchos necesarios para quimioterapias, estas patologías en general son de alto costo”, expresó.
Señaló que alrededor del dos por ciento de los pacientes de un sistema de salud representan el 60 por ciento del gasto en salud. Y esto tiene que ver con enfermedades crónica degenerativas no transmisibles como el cáncer.
“Un pequeño grupo de pacientes ocupa la mayor parte del presupuesto de medicamentos y cuando además se trata de pacientes con cáncer en etapas avanzadas, entonces las alternativas terapéuticas, que son más sofisticadas, no tienen opción de genéricos”, lamentó.
¿Qué se puede hacer desde el lado médico?
La especialista explicó que también hay una realidad de una sobresaturación de los centros de atención, además de que los doctores no cuentan con los recursos necesarios, lo que requiere que exista la unión del sector público y privado, para una mayor y mejor atención a los pacientes.
“Que podamos aprovechar la infraestructura del sector privado al servicio de las necesidades que debe atender el sector público”, aseguró.
Respecto a la atención de los pacientes, recomendó a los médicos trabajar en la empatía y en ampliar la información al paciente sobre cuál es el camino a su tratamiento.
Lamentó que pacientes en el sector público se quejen de una falta de tiempo por parte de sus doctores para explicarles el paso a paso de sus tratamientos.
