La salud visual debe ser un tema de prioridad en la agenda pública y en conmemoración del Día Mundial de la Visión algunos especialistas ofrecieron propuestas y avances que se han logrado con la colaboración de algunos grupos especializados como es la Sociedad Mexicana de Oftalmología.
Según el doctor Francisco Beltrán Díaz de la Vega, presidente de la Sociedad Mexicana de Oftalmología, las cifras de los padecimientos visuales que pueden ser tratados antes de incurrir en la ceguera, se encuentran por encima del 40 por ciento, sin embargo, la falta de información sobre el cuidado de la salud visual, impide diagnosticar de manera temprana estas enfermedades.
La ceguera es la pérdida total de la visión y puede ocurrir de manera innata o a causa de alguna complicación por deficiencia visual o una mala atención médica en el peor de los casos. Por otro lado la deficiencia visual no incurre en la ceguera, sin embargo dificulta la vida cotidiana del paciente, en este caso puede afectar la agudeza visual, la nitidez de los colores o la profundidad de los espacios.
La calidad de vida de una persona con discapacidad visual o ceguera se ve truncada de gran manera, para algunos pacientes se vuelve imposible salir a la calle sin compañía, dejan de conducir sus autos, de andar en bicicleta o les afecta en actividades tan simples como firmar documentos o ver la televisión, así como esquivar objetos, lo que a su vez puede producir accidentes.
El doctor Jorge Valdéz García, presidente del Centro Mexicano de Salud Visual Preventiva, destacó que es necesaria una campaña de educación para que acudan a consulta sin la necesidad de tener algún síntoma para así poder adelantarse al riesgo, tratarlo y curarlo.
Añadió que en México, en comparación de otros países como Canadá y Estados Unidos, le hace falta practicar más cirugías, pues enfermedades como las cataratas, son reversibles a través de una operación.
En la Sociedad hay aproximadamente 3.500 oftalmólogos registrados en todo el país, sin embargo se calcula que existen 5.000 en total, es decir, México cuenta con 33 oftalmólogos por cada millón de habitantes y la mayoría se encuentran en la Ciudad de México, Jalisco y Monterrey lo que provoca que estados como Durango, Zacatecas y Tlaxcala, no cuenten con especialista en el sector público.
El doctor Francisco Martínez Castro, coordinador del Programa de Visión 2020 Latinoamérica, asegura que la mayoría de los casos de ceguera en el continente son efectos de enfermedades que pudieron ser tratadas de manera temprana.
Una de las grandes limitantes del cuidado de la salud visual es presupuestaria, pues los hospitales del sector público llegan a atender hasta a 88.000 pacientes al día, algunos pertenecientes a diversos estados del país, es decir, existe una saturación severa.
El reto es mejorar el registro de pacientes, la actualización de los aparatos tecnológicos, la capacitación para hospitales no especializados, hacer una revisión de los modelos para detección y diagnóstico de enfermedades visuales.
Entre las estadísticas de ceguera considerables, se encuentra la Retinopatía Diabética, que afecta al menos al 40% de los pacientes con, al menos, 5 años de padecer diabetes, cuyo índice de ceguera mundial se encuentra en el 5 por ciento.
Ante esta problemática el doctor Jans Fromow indicó que todo paciente diabético debe practicarse una revisión semestral para evitar futuras complicaciones y poder curar efectos de la diabetes; las clínicas u hospitales familiares deberán canalizar al paciente antes de que este tenga algún síntoma.
También fue mencionada la importancia de la revisión de todo neonato antes de las cuatro semanas de vida, sobre todo aquellos que nacieron de manera prematura ya que los 2.200.000 niños en el país, 77.000 nacerán de manera prematura y al menos 500 de ellos sufrirán ceguera, número que podría revertirse con capacitación e infraestructura adecuada, indicó el doctor Porfirio López, presidente electo de la SMO.