Advierte de la presión que está soportando Atención Primaria y apela a la responsabilidad ciudadana para que todos colaboren en mantener el orden en la atención sanitaria
24 de marzo 2020. 2:00 pm
El Colegio de Médicos de Gipuzkoa ha decidido hacer un llamamiento a la ciudadanía para que cumpla al máximo las recomendaciones de la autoridad sanitaria. En palabras de su presidente, el Dr. Manuel García Bengoechea, “necesitamos convenceros de que la responsabilidad es de todos”. El…
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Colegio de Médicos de Gipuzkoa ha decidido hacer un llamamiento a la ciudadanía para que cumpla al máximo las recomendaciones de la autoridad sanitaria. En palabras de su presidente, el Dr. Manuel García Bengoechea, “necesitamos convenceros de que la responsabilidad es de todos”. El presidente añade que “cada persona que no cumple con las normas de aislamiento y confinamiento, colabora directamente con un retraso en llegar a la solución, favorece nuevas infecciones, y en consecuencia aleja el final de la
pandemia, y, por lo tanto, de la actual situación de confinamiento”. Por ello, recomienda seguir estrictamente las normas e instrucciones que emite Osakidetza y colaborar así a mantener el mejor orden posible en la atención sanitaria.
Desde el Colegio advierten de la enorme presión que están soportando los servicios médicos, en especial Atención Primaria, que tiene a sus espaldas la responsabilidad no solo de atender a sus pacientes habituales, sino también de asumir que los infectados por coronavirus y sus contactos sigan las recomendaciones sanitarias en vigor, con criterios y protocolos comunes a todos. Esta atención evita que los servicios hospitalarios se saturen. Según Bengoechea, “los médicos de AP son la primera línea y la base de todos los sistemas de salud. Tener el mejor hospital no sirve de mucho si lo que le rodea, es decir, Atención Primaria, no resuelve todo aquello que no es hospitalario, y esa labor es fundamental”.
Recuerdan que en estos momentos los ciudadanos deben consultar con su médico de familia en caso de estar enfermos, y evitar consultar por problemas familiares, sociales o cuestiones burocráticas que no sean de estricta urgencia. “De este modo, podremos conseguir que pronto el número de nuevas infecciones inicie una curva descendente. Si no lo logramos los sanitarios irán infectándose y dispondremos cada vez de menos profesionales”, concluye.