El Congreso de Gerontología y Geriatría avanza por la salud del adulto mayor

El domingo 8 de abril comenzó el Congreso de Gerontología y Geriatría XXXII en la Unidad de Congresos de Centro Médico Nacional s.XXXI. Durante las ponencias se han tratado los temas más importantes para mantener y salvaguardar la calidad de vida del adulto mayor tomando en cuenta las comorbilidades y la propia sintomatología de la edad, invitando a los doctores tanto especialistas como generales e internistas para que se relacionen con este grupo etario, pues seguirá creciendo en los próximos años. Fracturas por fragilidad Sobre la prevención secundaria de fracturas por fragilidad, los doctores Alfredo López Ponce, María dolores Alfonso y Abel Barragán Berlanga ahondaron en la utilización de tratamientos como el bifosfonato, la vitamina D, antiosteoclasticos, alendronato y risedronato. Fueron mostrados diferentes estudios en los que es necesario tener un tratamiento complementario, pues no sólo una sustancia tiene el efecto requerido y hay algunas que tienen mejor resultado con la utilización prolongada y coadyuvante para fracturas secundarias, no importa que no se muestre una tendencia de fragilidad en la densitometría ósea. En este sentido los especialistas mostraron puntual interés en la prevención de las fracturas y la fragilidad ósea en la cual es necesario que el médico recete calcio o tratamientos orales más específicos para evitar una fractura primaria. Hay especificaciones en las que se contraindica la utilización de estos tratamientos como en caso de Enfermedad Crónica Renal, también algunos odontólogos recomiendan no utilizarlos, pero no hay suficiente sustento científico para no utilizarlos que sólo la indicación odontológica. Alimentación especializada y personalizada por morbilidades Por su cuenta el doctor Rafael Flores Martínez del Hospital General de Alta Especialidad “Centenario de la Revolución Mexicana” del ISSSTE detalló los factores que pueden llevar al paciente a una sarcopenia, como la Diabetes Mellitus, la Enfermedad Renal Crónica o la Falla Hepática que necesitan terapia de sustitución con diálisis o hemodiálisis. Estas morbilidades pueden provocar fragilidad temprana, resistencia a la insulina, homeostasis, vulnerabilidad, probabilidad en fracturas, también se mencionó que mientras las mujeres tienen una mayor tendencia de tener niveles bajos de vitamina D después de la menopausia y la falta de testosterona puede provocar un avance considerable en la pérdida acelerada de masa muscular. En cuanto a los tratamientos, las dosis de testosterona han demostrado que son una terapia efectiva para recuperar masa muscular cuando el paciente tiene deficiencia hepática relacionada con hemodiálisis y diálisis peritoneal. La nulidad de testosterona en las mujeres las hace más propensas a presentar mayores índices de fracturas, debilidad física y muscular. Sin embargo, en ambos casos, hombres y mujeres, durante la vejez hay una disminución de la hormona Grelina, que controla el apetito del paciente, lo que ocasiona una anorexia favorecida y culmina en una falta de crecimiento, también infieren la pérdida del sentido del gusto y del olfato. Se recomienda el ejercicio de resistencia más que el cardiovascular para estos pacientes, esto ayuda a recuperar masa muscular con mayor facilidad y a controlar su motricidad al caminar, además es necesario mantener una alimentación adecuada, baja en grasas y con mayor índice proteicos siempre controlados por el médico. Vitamina D, Calcio y suplementos La recomendación de los suplementos proteicos son la mejor opción para la recuperación de masa muscular sobre todo aquellos con HMB cuyas unidades equivalen a las proteínas de 4000 aguacates o 110 huevos, dijo la doctora María del Consuelo Velázquez Alva de la Universidad  Autónoma Metropolitana. Entre los alimentos a consumir recomendó el brócoli, los quesos, la carne magra, huevo, pollo, lentejas. En cuanto a la leche y el suero de eche mencionó que la primera tiene más caseína que el suero, sin embargo, la caseína del suero tiene mayor digestibilidad. El no cuidar la alimentación del adulto mayor puede desencadenar un envejecimiento prematuro por la disminución de los antioxidantes, así como reducir la función cognitiva y depresión por un aislamiento social limitante por las terapias de sustitución de la función renal o hepática. Cada una de las terapias, suplementos y recomendaciones alimentarias deben consultadas con el especialista, ya que la alimentación personalizada es lo que tendrá un mejor impacto en la calidad de vida y salud del paciente geriátrico. El congreso concluirá el miércoles 11 de abril.