El próximo 31 de mayo es el Día Mundial Sin Tabaco. Con ese motivo,
Aflofarm junto a la
Asociación Nacional de Informadores de la Salud (ANIS) han querido alertar de su consumo y la sensibilización sobre sus riesgos asociados, además de sus consecuencias.
En este contexto,
Maldita ciencia ha elaborado de forma independiente un decálogo que aborda los mitos y dudas más comunes, cuyo propósito es proporcionar información precisa y verificada sobre los riesgos asociados al tabaquismo.
Cifras preocupantes
Por otro lado, como especifica el Dr.
Raúl de Simón, Médico de Familia en el Centro de Salud Luis Vives, de Alcalá de Henares y Coordinador Nacional del grupo de trabajo de Tabaquismo de la Sociedad Española de Médicos de Atención Primaria (SEMERGEN), “tomando como referencia la encuesta sobre consumo de alcohol y otras drogas en España (EDADES) en el año 2022, el 69,6% de la población de 15 a 64 años había consumido tabaco alguna vez en la vida, el 39 % en el último año, el 37,2% en el último mes y el 33,1% diariamente en los últimos 30 días. Sin duda, cifras demasiado elevadas que nos advierten que el tabaquismo continúa siendo un problema sociosanitario de primer orden”.
El papel de las redes sociales
El Dr. Jaime Signes, Neumólogo, jefe del servicio de Neumología del Hospital Clínico de Valencia y Ex-coordinador del área de tabaquismo de SEPAR, ha recalcado que “con claridad puede afirmarse que una información veraz es necesaria para que la población conozca los riesgos de inhalar humo del tabaco”. Además, insiste que, “por otra parte, la publicidad está prohibida en cualquier medio desde la ley indicada. Las compañías tabaqueras utilizan diversas estrategias (sobre todo a través de las RRSS) para intentar “normalizar” el uso del tabaco entre la población. Existen estudios que han demostrado que invierten dinero en series, películas, etc. para presentar a los espectadores el tabaco como algo habitual y deseable”. Así, recalca que “el papel ejemplar de cualquier trabajador/a sanitario/a se conoce desde hace décadas. La figura del médico fumando o aconsejando fumar algo menos, se desterró hace muchos años. Ahora el trabajo se centra en dar una información concreta y veraz cada vez que atendamos a una persona fumadora. Hay que hacer hincapié en que no se trata de un hábito, una costumbre o un vicio, es simplemente una enfermedad adictiva crónica que merece todo el esfuerzo terapéutico que podamos aplicar y que debe incluir apoyo psicológico y farmacológico en la mayoría de situaciones”.
Por su parte, en este contexto,
Raúl de Simón opina que “los médicos también somos usuarios de redes sociales y como tales, conocemos de primera mano este contexto. Hoy en día, el inmenso universo de información sanitaria disponible en la red, exige una búsqueda exhaustiva a la hora de poder ofrecer recomendaciones y asesoramiento fiables. Por poner un ejemplo, la prescripción de sitios web y aplicaciones para dejar de fumar es ya una realidad en muchas consultas de profesionales sanitarios”.
¿Cuántas consultas pueden evitarse con buena información?
Según Raúl de Simón “muchas de las consultas son eso, consultas informativas que no siempre deben requerir de la verificación de un profesional sanitario. Hoy en día, saber buscar y encontrar información útil sobre los problemas de salud más allá de la consulta, es una transcendental ventaja para muchos pacientes, facilitando con ello la toma de decisiones compartida”.
Por otro lado, como describe el Dr. Signes, “en el apartado de las enfermedades respiratorias existen 2 ejemplos claros. La enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC) es debida al humo del tabaco en más de 75% de los casos en nuestro país. Por otra parte, el cáncer de pulmón está causado por el tabaquismo en el 85% de las ocasiones”.
Para concluir, Simón advierte que, en el caso del tabaquismo y redes sociales, conviene alertar sobre el peligro que supone la aparición de la industria tabacalera en este universo. Es conocido que la publicidad se está trasladando cada vez más a las plataformas digitales, y las industrias de la nicotina y el tabaco no son diferentes. Debemos recordar que, aunque muchos países han adoptado prohibiciones de publicidad, promoción y patrocinio, no lo han hecho explícitamente con la publicidad transfronteriza, siendo susceptibles de exponer a sus jóvenes a la publicidad digital y redes sociales de otros países. En este sentido, más de 100 hashtags asociados con empresas tabacaleras fueron vistos más de 25 mil millones de veces en todo el mundo entre 2007 y 2016.
Las mujeres, más riesgo
Por su parte, Signes finaliza con un comentario necesario sobre la relación entre las enfermedades asociadas al tabaco y las mujeres: “El cáncer de pulmón sigue aumentando su incidencia en mujeres (en hombres ya parece estar disminuyendo), igual que la presencia de una EPOC, expresión de la introducción más tardía en el tabaquismo, comparado con los hombres”.