Recientemente se ha celebrado
la 30° edición del Congreso Europeo de Obesidad (ECO), en Dublín, un espacio dedicado a los profesionales e investigadores en el tratamiento y el abordaje de la obesidad y del sobrepeso. Año tras año, nos invita a ser conocedores de los avances en esta área, pero también a darnos cuenta del camino que todavía nos queda para seguir avanzando y mejorando.
En esta edición, se ha contado con un completo programa de cuatro días donde se han abordado, a través de mesas redondas y conferencias de alto prestigio, temas de actualidad, pero también de futuro. Los pilares principales sobre los que se han apoyado las diferentes temáticas presentadas y encuentros de debate han sido:
a) comportamiento y salud pública, b) bases científicas, c) obesidad infantil y adolescente, d) gestión e intervenciones.
El abordaje de la obesidad
En este contexto, no se pueden obviar las cifras y los indicadores que nos colocan en una situación de máxima preocupación. Tal y como señaló la propia
European Association for the Study of Obesity (EASO) en una de sus últimas publicaciones,
una de cada cuatro personas en Europa podría vivir con obesidad en 2025. Este dato tan alarmante ha generado todavía mayor impacto cuando se ha abordado la situación actual de la obesidad infantil y adolescente. Según datos publicados por la Organización Mundial de la Salud (OMS) en 2022,
uno de cada tres niños europeos tiene sobrepeso u obesidad. Los índices de prevalencia que se estiman alcanzar en los próximos años dentro de esta categoría de pacientes están llevando el paradigma social y educacional hacia nuevos horizontes de estudio y han protagonizado simposios destacables en cuanto a calidad y rigurosidad.
Buena parte de la atención se centra en la estructura sanitaria, en especial la sanidad pública, que se enfrenta a un gran reto. Se presentan actores y factores decisivos, entre los que se encuentran la financiación y la gestión educacional de la población respecto a hábitos de vida saludable que permitan controlar esta tendencia en aumento.
La prevención se ha planteado como una de las principales estrategias que permiten reducir la prevalencia de sobrepeso y obesidad. La promoción de políticas de actuación en esta línea será, muy probablemente, uno de los temas de mayor impacto en los próximos años.
Amplio abanico de posibilidades
Actualmente, el contexto que engloba la obesidad ha dado lugar a un amplio abanico de posibilidades de tratamiento. En este escenario es fundamental que se investigue en profundidad la seguridad, la eficacia y la calidad de los nuevos abordajes.
Una señal de esta necesidad es que sociedades internacionales tan prestigiosas relacionadas con el ámbito de la salud, la nutrición y el tratamiento del sobrepeso y la obesidad, como
European Association for the Study of Obesity (EASO) y
European Federation of the Associations of Dietitians (EFAD), hayan publicado, en diciembre de 2022,
una declaración de posicionamiento de intervenciones nutricionales para el tratamiento del exceso de peso. Y en este sentido, el congreso ha respondido activamente, generando espacios específicos para el análisis y debate de algunas de ellas.
Un simposio para la reflexión
En el simposio denominado
The Use of Evidence-Based Dietary Interventions for the Management of Obesity, que ha contado con la presencia de destacados expertos, como el
Dr. Bart van der Schueren, presidente de la Asociación Belga para el Estudio de la Obesidad (BASO) o el Dr. Luca Busetto, presidente electo de la EASO, se ha defendido la necesidad de apostar por aquellos métodos que cuenten con el aval de la evidencia y que se incluyan dentro de una estrategia de tratamiento que vaya más allá de la simple pérdida de peso corporal
(como el método Pronokal).
Asimismo, este simposio contó con la destacable participación del
Dr. Felipe Casanueva, miembro honorario de la Sociedad Española de Obesidad (SEEDO), que presentó diversos estudios científicos que evidenciaban la eficacia y la seguridad de la Very-Low-Calorie Ketogenic Diet (VLCKD) como tratamiento para el sobrepeso y la obesidad. Posicionada como el nivel más alto de evidencia científica (nivel 1A) por la declaración publicada por EASO y EFAD antes mencionada, su ponencia destacó también la efectividad de esta intervención en pacientes con diabetes tipo II, gracias a la reducción de grasa visceral y el mantenimiento de la masa muscular durante el proceso de pérdida de peso. Esta intervención nutricional, junto a los efectos beneficiosos vinculados a las comorbilidades, induce efectos positivos a nivel inmunológico.
No debemos olvidar que las comorbilidades derivadas de la obesidad conllevan un alto riesgo en la salud de los pacientes. Por tanto, su control y remisión deben formar parte de cualquier abordaje médico que busque obtener una mejor calidad de vida.
ECO 2023
Encuentros de profesionales de la salud, como ECO 2023, brindan, sin duda, una oportunidad para encontrar nuevos caminos y abordajes en esta situación compleja que plantea el incremento de la obesidad a nivel mundial. También requiere del compromiso de todos los implicados en su investigación y tratamiento, de forma directa o indirecta, para fomentar y procurar un futuro con alternativas, propuestas y nuevas soluciones.
Los asistentes nos convencimos sobre el necesario reenfoque de la obesidad; y es que los nuevos paradigmas sociales, así como la necesidad de desestigmatización del paciente y de su enfermedad, han tomado el relevo al clásico enfoque pesocentrista de la obesidad, basado en el IMC, surgiendo nuevas propuestas basadas en garantizar la salud global de las personas con sobrepeso y obesidad.
