Con motivo del Día Mundial del Sueño, la Sociedad Española de Neurología (SEN) ha querido recordar el impacto que tiene no dormir suficiente o tener una mala calidad de sueño en nuestra salud. Tal y como explicaba Carles Gaig Ventura, coordinador del Grupo de Estudio de Trastornos de la Vigilia y Sueño de la Sociedad Española de Neurología (SEN), “el sueño cumple un papel muy importante en nuestro metabolismo, en nuestro sistema inmunológico, en el estado de ánimo, en la memoria, en el aprendizaje”.
Más concretamente el experto relataba que “no dormir adecuadamente puede conllevar a que surjan complicaciones endocrinas, metabólicas, psicológicas, inmunológicas, psicomotoras, además de que cada vez más se considera el mal sueño como un desencadenante o riesgo para determinados trastornos neurológicos como ictus, Parkinson, Alzheimer o diversas enfermedades neuromusculares. En definitiva, no dormir adecuadamente es un problema de salud”.
Teniendo en cuenta estas implicaciones, las cifras en cuanto a la calidad del sueño de los españoles no son muy positivas, ya que según la SEN, entre un 20 y 48 por ciento de la población adulta sufre dificultad para iniciar o mantener el sueño. Asimismo, al menos un 10 por ciento de la población sufre algún trastorno de sueño crónico y grave, lo que supondría más de 4 millones de personas en España.
Sin embargo, la SEN estima que más dos tercios de las personas que padecen problemas de sueño no buscan ayuda profesional y, por lo tanto, carecen de diagnóstico. Además, al menos un 5 por ciento de los pacientes se automedica, habitualmente a diario, a pesar de que los fármacos hipnóticos tomados de forma habitual y sin control médico pueden tener muchos efectos secundarios, algunos realmente graves.
Diferentes trastornos
Aunque existen más de un centenar de trastornos del sueño, el insomnio es el más prevalente (20-30 por ciento), seguido del síndrome de las piernas inquietas (5 por ciento) y del síndrome de apneas-hipoapneas del sueño (4-5 por ciento). Otros trastornos del sueño también bastante frecuentes son la narcolepsia, la hipersomnia idiopática, el trastorno de conducta durante el sueño REM, parasomnias o trastornos del ritmo circadiano.
Igualmente, no solo preocupan los trastornos en población adulta, ya que según datos de la Sociedad Española de Neurología (SEN) aproximadamente el 20-25 por ciento de la población infantil sufre algún tipo de trastorno del sueño.
A este respecto Carles Gaig argumentaba que, “aunque las necesidades de descanso cambian a lo largo de la vida, una pobre calidad del sueño nunca debe ser entendida como un proceso normal pues las causas que subyacen podrían ser un factor de riesgo para otras complicaciones en la salud. Y si no se tienen malos hábitos de sueño, cada persona debería poder cumplir con la ‘cuota’ de sueño que necesite para sentirse reparados. Si no es así nunca se deben tomar medicamentos para dormir sin consultar antes con un especialista”.
Entre un 20 y 48% de los españoles sufre dificultad para iniciar o mantener el sueño
La mala calidad de sueño es un desencadenante o factor de riesgo para trastornos neurológicos, como ictus, párkinson, alzhéimer o diversas enfermedades neuromusculares
El Médico Interactivo
14 de marzo 2019. 1:50 pm