Actualmente, España se encuentra entre los 5 países europeos que presentan más casos de Alzheimer con una prevalencia del 1,36 por ciento, ya que esta enfermedad afecta a más de 800.000 personas en España, al 10 por ciento de la población mayor de 65 años y casi al 50 por ciento de la población mayor de 85 años. Además, según varios estudios, en 20 años, se estima que estas cifras se dupliquen.
En este contexto, la Alianza por el Alzheimer, nacida bajo el auspicio de la Confederación Española de Asociaciones de Familiares de personas con Alzheimer y otras Demencias (CEAFA), la Fundación Pasqual Maragall, la Sociedad Española de Neurología (SEN), la Sociedad Española de Médicos de Atención Primaria (SEMERGEN), la Sociedad Española de Geriatría y Gerontología (SEGG), con la colaboración de Pfizer, ha abogado por una Estrategia Nacional de Alzheimer (Plan Nacional de Alzheimer o Política de Estado de Alzheimer) que dé respuesta a las necesidades de las personas afectadas (pacientes y cuidadores familiares) a partir de un impulso decidido a la atención social, a la investigación, a la formación de profesionales y a la protección jurídica de estas personas.
En este sentido, la Alianza se ha constituido con el fin de afrontar y dar respuesta a esta enfermedad que repercute en la vida diaria de 3,5 millones de personas, ya que el Alzheimer es una enfermedad que no sólo afecta al paciente, sino también a sus familiares y cuidadores. Por ello, la Alianza por el Alzheimer ha decidido aunar esfuerzos en la lucha por la mejora de la calidad de vida de este importante grupo de la población.
Por otra parte, en términos económicos, el Alzheimer se traduce en el endeudamiento de miles de familias, ya que el coste de mantener a una persona con esta enfermedad es de 30.000 euros al año por familia, por encima del salario bruto anual medio español que es de 22.000 euros.
Ejemplo de la Unión Europea
En otro orden de cosas, la Alianza por el Alzheimer está luchando por la consecución de una Estrategia Nacional de Alzheimer que equipare el abordaje del Alzheimer en España al de otros países europeos, como Francia o Reino Unido, donde disponen de planes nacionales específicos.
Así pues, la necesidad de combatir el Alzheimer, recogida en la Declaración aprobada por el Parlamento Europeo en 2009, donde se destacan la investigación, el diagnóstico precoz, la simplificación de los trámites para enfermos y cuidadores y el apoyo regular a las asociaciones de Alzheimer como elementos clave, ha hecho que la Alianza por el Alzheimer haya abogado por solicitar la implicación y el apoyo de todos los agentes gubernamentales para dar respuesta a este problema socio-sanitario.