Durante la VI Convención de la Profesión Médica, organizada por la Organización Médica Colegial y que se ha celebrado en Madrid los días 16 y 17, tuvo lugar una mesa centrada en la “Formación del médico y acreditación de la formación médica en el marco europeo”, en la que dos expertos aportaron su visión sobre el tema y respondieron a las cuestiones planteadas por los presidentes de diferentes colegios de médicos españoles. La introducción al acto corrió a cargo del presidente del COM de Cuenca, Carlos Molina.
Desde su experiencia como vicepresidente de la Unión Europea de Médicos Especialistas (UEMS), Joao Grenho analizó la formación médica en el contexto comunitario y habló de la falta de uniformidad frente a la variabilidad de cada país en función de los correspondientes sistemas médicos y características formativas. Sugirió la necesidad de establecer límites que ningún médico pueda transgredir, y a pesar de la dificultad de lograr una homogeneización formativa, “implementar medidas y garantías de calidad mínimas para todos los médicos”. “Tenemos que crear un límite por debajo del cual ningún médico practique. Las desigualdades de los diferentes sistemas de salud de cada país son muy grandes, por eso hay que garantizar un mínimo, que deberá ser cada vez más alto, para todos los médicos europeos”. En este sentido, con el fin de alcanzar un consenso, su organización está llevando a cabo contactos con todos los países del espectro comunitario.
Ante esa heterogeneidad en la educación médica en los distintos países, una solución pasaría por intentar elevar el nivel formativo en los más deficitarios mediante la ayuda del resto. En este sentido, destacó el gran prestigio y reputación de España en formación sanitaria especializada y la alta calidad de las actividades promovidas por nuestros colegios profesionales que “atrae la mirada de los países europeos”.
Respecto a la financiación de la formación médica continuada, el experto considera que hay un lugar para el patrocinio de la industria farmacéutica, pero ajustándose a unas reglas claras y a una transparencia total, así como a una constante revisión condicionada por la evolución de la formación. “Creo que en los países menos desarrollados, el apoyo de la industria es fundamental”, si bien los contenidos tienen que estar creados por médicos, sin interferencia de la industria.
El segundo ponente fue Rodrigo Gutiérrez Fernández, director general de Ordenación Profesional del Ministerio de Sanidad, Consumo y Bienestar Social, para quien el problema de la moderna atención sanitaria es un conflicto entre los costes y la calidad, conflicto que, en su opinión, ha dado lugar a discursos continuados sobre la sostenibilidad y eficiencia en el uso de los recursos y de la calidad asistencial, que ha sido asumido y que se ha trasladado a los pacientes.
Pequeños ajustes en el MIR
En relación con la formación especializada, Gutiérrez Fernández sugirió la necesidad de introducir pequeños cambios -“no grandes reformas”- para garantizar la continuidad del buen funcionamiento del sistema MIR otros cuarenta años. Entre esos pequeños ajustes mencionó la incorporación de competencias y habilidades en los programas de formación, más contenido de bioética, de gestión, de calidad asistencial, de violencia de género, de habilidades de comunicación..., así como una mejor valoración del expediente académico en el examen MIR.
Respecto a la troncalidad, cuando se cumplen dos años de la anulación del Real Decreto manifestó el compromiso por la creación de una Comisión para la redacción de la norma y estructurar esa formación sanitaria especializada con el peso de las competencias transversales genéricas comunes que debería tener cualquier profesional.
En cuanto a las cuestiones planteadas por los demás integrantes de la Mesa, José Luis Almudí Alegre, presidente del COM de Valladolid, se centró en el déficit de profesionales y la recertificación de la formación, José Ramón Huerta Blanco, presidente del COM de Soria, reflexionó sobre la falta de homogeneidad en la acreditación, y Sebastián Martínez Fernández, presidente del COM de Zamora, se interesó por el sistema MIR. Finalmente, Alejandro Braña Vigil, presidente del COM de Asturias, consultó sobre el nivel de aplicación práctica de la acreditación europea, y Tomás Cobo, vicepresidente 1º de la OMC, reiteró la importancia de que el médico posea unos estándares mínimos ante esa dificultad de homogeneizar la formación.
Europa necesita colaboración entre países para homogeneizar la formación
El director general de Ordenación Profesional sugiere la introducción de pequeños cambios en el MIR
Isabel Sánchez Aguiar
19 de noviembre 2018. 3:30 pm