El papel y la experiencia del farmacéutico de hospital en relación a la gestión del tratamiento a enfermos crónicos (y un sistema enfocado a éstos es el gran cambio que aún debe dar el sistema sanitario español) 'no pueden desaprovecharse'. Así lo ha destacado Félix Rubial, director asistencial del Hospital Lucus Augusti, del Sergas, en la mesa redonda 'Desde la Gestión a la Proximidad del Paciente', la segunda mesa sobre Medicina Participativa del 56 Congreso Nacional de la Sociedad Española de Farmacia Hospitalaria, que se ha celebrado en Santiago de Compostela. En la mesa se ha incidido en la idea de que un sistema enfocado a los enfermos crónicos es el gran cambio que aún debe dar el sistema sanitario español.
El doctor Rubial se ha referido a que el papel del farmacéutico de hospital: sistematizar la revisión de tratamientos, mejorar la adherencia, conciliar tratamientos, integrar equipos multidisciplinares, la cercanía al paciente (fomento del autocuidado de éste), el liderazgo clínico... no se puede dejar de lado, hay que aprovecharlo. Aunque Rubial ha criticado que en España, pese a que la OMS ya haya dicho que estamos en el siglo de las enfermedades crónicas o que social y económicamente ya se haya aceptado este cambio o que se den las condiciones (en España se cumplen las normas exigidas para ser un sistema eficiente en el tratamiento a crónicos), el sistema aún no se ha modificado.
'El desafío es transformar nuestro sistema sanitario. Seguimos haciendo una Medicina basada en el fracaso, basada en curar enfermos agudos: el sistema está orientado a curar pero no a curar', ha dicho Rubial, que se ha referido al proyecto 'Mejora de la calidad en la asistencia a pacientes crónicos polimedicados de Galicia', puesto en marcha por el Sergas.
Como se ha destacado en la mesa, el cambio del sistema, enfocarlo a la atención a crónicos, exige un cambio en todos sus componentes. El moderador de la mesa, Carlos Crespo, del Servicio de Farmacia del CHUS de Santiago de Compostela, ha explicado que pacientes, gestores y profesionales son los tres círculos que deben unirse para prestar la mejor asistencia sanitaria; y que hay tres áreas claves: los crónicos, la práctica profesional y la optimización de recursos.
Y precisamente en todos estos aspectos, se ha resaltado, la gestión que realiza en su labor diaria el farmacéutico de hospital tiene mucho que decir.
En la mesa, José Cabeza ha explicado su experiencia como director de la Unidad de Gestión Clínica de Granada. Las UGC, ha dicho, son muy válidas para lograr eficiencia en la continuidad asistencial y en la relación Primaria-Hospitalaraia. También aquí, en cuestiones como la unificación de procedimientos, la seguridad del paciente (intervenciones conjuntas de los dos niveles para la detección del uso inadecuado de medicamentos) o la gestión del conocimiento (sesiones clínicas intercentros) puede y debe ser determinante el papel del Sevicio de Farmacia Hospitalaria.
La aportación del farmacéutico de hospital
En las dos últimas ponencias de la mesa se ha reiterado la importante aportación, cada vez mayor, del farmacéutico de hospital en relación con el paciente ambulatorio.
Sobre la integración del Farmacéutico en el Equipo Clínico, la experiencia en enfermedades infecciosas y Medicina Interna, ha hablado Montse Tuset, del Servicio de Farmacia del Hospital Clínic i Provincial de Barcelona, que ha resaltado la importancia de que el farmacéutico de hospital tenga tiempo de colaborar en cuestiones formativas, en la adherencia a los tratamientos o en paliar las interacciones de medicamentos.
De la Gestión Farmacoterapéutica del Paciente de Edad Avanzada, Pluripatológico y Polimedicado ha hablado Pilar Blasco, jefe del Servicio de Farmacia del Hospital General Universitario de Valencia, que ha resaltado la importancia ayuda que supone la prescripción electrónica asistida, aunque en ningún caso, ha recordado, el clínico puede ser sustituido. 'En crónicos no hay que hacer más, sino hacerlo mejor', ha dicho.