'El reumatólogo en general se caracteriza por ser inquieto y demandar actividades formativas y, en este sentido, gracias a la formación continuada que proporciona la SER, se mantienen actualizados en este tipo de patologías'. Así lo ha puesto de manifiesto la Dra. Paloma Vela, reumatóloga del Hospital General Universitario de Alicante y profesora asociada del Departamento de Medicina de la Universidad Miguel Hernández de Elche, con motivo de la presentación del IV Simposio de Enfermedades Autoinmunes Sistémicas, que organiza la Sociedad Española de Reumatología y que tenía previsto su celebración este sábado 22 en Alicante, tal y como se informaba al cierre de esta edición.
No obstante, y según ha destacado la Dra. Vela, en la actualidad estos profesionales 'poseen adecuados conocimientos sobre las enfermedades autoinmunes sistémicas, ya que forman parte del núcleo central de conocimientos de la especialidad de Reumatología, y la habilidad para su manejo se adquiere durante el periodo de formación'.
Por otro lado, datos manejados por experta, han puesto de manifiesto que el estrés, el embarazo y puerperio, la exposición solar o ciertas infecciones víricas pueden ser factores causantes o desencadenantes de las enfermedades autoinmunes sistémicas (EAS). Se estima que uno de cada cuatro adultos (mayores de 20 años) en España padece algún tipo de enfermedad reumática y, teniendo en cuenta que en torno al cinco por ciento de estas patologías son de carácter autoinmune, podría haber alrededor de medio millón de afectados por EAS en este país.
Por su parte, el Dr. Eliseo Pascual, catedrático de Medicina de la Universidad Miguel Hernández de Elche (Alicante), ha recordado que entre las enfermedades autoinmunes sistémicas, las más habituales son el lupus eritematoso sistémico (LES), el síndrome de Sjögren, la esclerodermia, las miopatías inflamatorias, las vasculitis y el síndrome antifosfolipídico. En ellas, se ha demostrado que los factores genéticos tienen una gran importancia, aunque puede haber otros que influyen como hormonales, ambientales o infecciosos, según el especialista, también jefe de Sección de Reumatología del Hospital General Universitario de Alicante.
Diagnóstico y tratamiento
El diagnóstico de estas enfermedades se basa en la combinación de datos clínicos y pruebas de laboratorio que pueden llegar a ser enormemente específicas de alguna enfermedad concreta. Además, según ha comentado la Dra. Vela, 'han aparecido nuevos anticuerpos que facilitan la detección de algunos procesos, así como mejoras en técnicas diagnósticas como la capilaroscopia o un mejor conocimiento de técnicas de imagen (radiografías, ecografías, escáner), por ejemplo, que facilitan el diagnóstico de algunas vasculitis'.
Por otra parte, respecto al tratamiento, a juicio de la especialista, 'los últimos años han sido especialmente interesantes en cuanto a la aparición de nuevos fármacos de enorme utilidad en el manejo de estas patologías, por ejemplo en lupus, así como la aplicación de nuevos protocolos más seguros y eficaces para tratar las vasculitis'.
En cuanto a su pronóstico, la experta ha afirmado que 'es muy variable en función del diagnóstico concreto y la gravedad de la enfermedad, pero globalmente ha mejorado en los últimos años gracias a un seguimiento más estrecho en las consultas de Reumatología, un mejor conocimiento de las posibles complicaciones (incluyendo las infecciones y los factores de riesgo cardiovascular) y una mejor utilización de los recursos terapéuticos'.