La Asociación de Economía de la Salud (AES) rechaza de manera rotunda una posible modificación de la Ley de Espacios sin Humo a instancias de grupos económicos del sector del juego y la hostelería, e insta al Gobierno central a que mantenga la legislación actual y no ceda ante los intentos de aplicar una 'devaluación en salud'.
En estos momentos, el Ministerio de Sanidad estudia la posibilidad de modificar esta ley aprobada en el año 2010, con la intención de favorecer la instalación del macroproyecto del complejo hostelero y de juego Eurovegas en España.
En un comunicado, este colectivo profesional defiende la legislación actual como 'un ejemplo de buenas prácticas y un modelo a seguir por otros países con regulaciones menos avanzadas'.
Al respecto, la AES recuerda que, con la ley en vigor, España da cumplimiento a sus compromisos como estado firmante del Convenio Marco de la Organización Mundial de la Salud (OMS) para el Control del Tabaco, cuyo artículo 8 exige la protección ante el humo en los lugares de trabajo y en los espacios públicos cerrados.
La Asociación Economía de la Salud centra sus líneas de trabajo en la reivindicación de la necesidad de que las decisiones políticas en materia sanitaria se adopten teniendo en cuenta criterios científicos y académicos. Y en consecuencia, señala que, según reconoce la comunidad científica, existen estudios que ponen de manifiesto los efectos beneficiosos de esta normativa a la hora de disminuir enfermedades y fallecimientos provocados por el tabaco.
Por tanto, ante los beneficios sobre la salud, los expertos de esta asociación reclaman al Gobierno que no introduzca ninguna modificación en la citada Ley de Espacios sin Humo, tal y como está reclamándose desde estos sectores privados.
Petición que se enmarca en la línea de trabajo de AES, que aboga por que las políticas de salud pública tengan una perspectiva integral que trascienda a las acciones estrictamente sanitarias. Lo que ellos plantean es el desarrollo de la iniciativa de salud en todos los terrenos, de forma que se avance en la actuación sobre todos los factores que influyen en la salud, en aspectos de la vida cotidiana como pueden ser la educación, la vivienda, el mercado laboral, el medio ambiente e incluso las políticas fiscales y sus efectos en la sanidad.