La puesta en marcha de este Plan supondría una mejoría en la concienciación de la enfermedad, el manejo y el cumplimiento adecuados de la medicación
17 de marzo 2022. 12:50 pm
En España, cerca de dos millones y medio de personas viven con asma, lo que supone un elevado impacto social, sanitario y asistencial. Es por ello que neumólogos y alergólogos de las principales unidades de Asma Grave de España han recogido una serie de conclusiones…
En España, cerca de dos millones y medio de personas viven con asma, lo que supone un elevado impacto social, sanitario y asistencial. Es por ello que neumólogos y alergólogos de las principales unidades de Asma Grave de España han recogido una serie de conclusiones y propuestas para mejorar el abordaje de la enfermedad. La principal de ellas es la necesidad de desarrollar un Plan Nacional de asma grave.
Este documento, en formato de infografía, se elaboró tras la celebración de la Jornada 'Retos y Medidas necesarias para la atención integral del paciente con asma grave'. La misma estaba organizada por la Sociedad Española de Directivos de la Salud (SEDISA), con la colaboración de GSK. Esta jornada, además, se enmarca en las actividades promovidas por el Instituto Nacional de Asma Grave (INAG). Este es un proyecto impulsado por GSK y que tiene por objetivo contribuir al avance en el abordaje de esta patología.
Necesidad de un Plan Nacional de asma grave
Según los expertos reunidos en este foro, llevar a cabo un Plan Nacional de asma grave supondría sentar las bases para optimizar la atención prestada a los pacientes. Pero también mejorar la capacitación de los profesionales, la investigación, la eficacia de las intervenciones en salud. Todo ello con la debida coordinación entre niveles asistenciales y especialidades. Igualmente, contando con una gestión integrada y eficiente de recursos y estructuras sanitarias. Tanto a nivel regional como supra autonómico.
Asimismo, la puesta en marcha de este Plan Nacional de asma grave ayudaría en la concienciación de la enfermedad. Esto sería clave en el manejo y el cumplimiento adecuados de la medicación; y la creación y el fortalecimiento de unidades especializadas multidisciplinares. En esta línea, redundaría en una disminución de las exacerbaciones y de los ingresos hospitalarios por asma, de la mortalidad, un manejo más adecuado de las comorbilidades. Esto conllevaría la reducción de la carga económica y asistencial, y una mejor evolución, a largo plazo, con reducción de los efectos secundarios de la medicación y de la pérdida de función pulmonar.
Continuar trabajando en las mejoras de la administración domiciliaria de medicamentos indicados para el asma grave no controlada también forma parte de las conclusiones alcanzadas. Punto en el que se hace referencia a la necesidad de optar por la personalización en la dispensación de los tratamientos adaptada al perfil, actitud y grado de autonomía de los pacientes.