La farmacia comunitaria juega un papel fundamental en el
abordaje de la dermatitis atópica (DA). Esta fue una de las ideas principales que sobrevoló en la sesión formativa celebrada el pasado martes 28 de noviembre en el Colegio Oficial de Farmacéuticos de Bizkaia, en Bilbao.
El encuentro, enmarcado en el Día Mundial de la DA, fue organizado en colaboración con
Abbvie, con el aval de la
Asociación de Afectados de Dermatitis Atópica (AADA) y secretaría técnica
Aula de la Farmacia aglutinó en la sede bilbaína a numerosos farmacéuticos de la región que quisieron sumarse a esta iniciativa, cuyo objetivo es la
formación continua.
El doctor Marc Julià Manresa, dermatólogo del Hospital Universitario de Basurto, hizo un recorrido por lo que es la DA, “una enfermedad inflamatoria crónica, muy recurrente en nuestra sociedad y que está
caracterizada por el prurito o picor crónico y eczema en la piel”.
Dermatitis atópica
Aunque se están produciendo avances destacados dentro del área de la dermatitis atópica, el doctor reclamó las necesidades que quedan por cubrir. “Solo algunos de los pacientes con DA de moderada a grave reciben
tratamiento sistémico, lo que puede sugerir que la enfermedad está infravalorada”.
En algunas ocasiones, la farmacia comunitaria puede ser punto recurrente de atención sanitaria y la gran aliada de los pacientes con DA que actualmente no están en consulta. Por lo que “es importante que los farmacéuticos estén al tanto de las novedades sobre el manejo de esta enfermedad para poder derivar al médico a aquellos pacientes que lo necesiten”.
Entre las terapias que buscan que el paciente mejore su calidad de vida, el dermatólogo enumeró los
cosméticos, que “lo que hacen es evitar dañar aún más una piel tan inflamada; los hidratantes intentan restaurar la piel alterada”, explicó.
También apuntó a los corticoides tópicos, como los antiinflamatorios. “Y los tratamientos sistémicos inmunosupresores convencionales; las
terapias avanzadas de los últimos años nos están ayudando con los pacientes con una dermatitis atópica de moderada a grave”, añadió el doctor Manresa.
Estigma
En el evento, la voz de los pacientes la puso África Luca de Tena de la Junta directiva de AADA, que hizo suyo el mensaje de la sesión “Lo que no se ve en la DA”. Tal como señaló, “la dermatitis se banaliza; como si no fuera una enfermedad inflamatoria crónica, sino algo estético. Y la realidad es que
el 44 % de los pacientes que la padecen en formas moderadas o graves precisan de ayuda psicológica”, sentenció
Y eso que la naturaleza crónica y recurrente de la patología
afecta al bienestar y la calidad de vida de las personas que la sufren, sobre todo en sus formas moderadas y graves.
Por lo general, se sienten estigmatizados, porque la sociedad tiene aún en mente, de forma errónea, que es una enfermedad contagiosa. “Ocurre que los signos en la piel, por falta de desconocimiento, producen rechazo en la gente. Y esto provoca un grave problema en los pacientes que tienden a retirarse de la vida social. También tiene sus implicaciones en el entorno familiar”.
Farmacia
Como la DA se considera erróneamente una enfermedad poco importante,
muchos pacientes no consultan a sus médicos de familia, pero sí a su farmacéutico de referencia. De ahí, la importancia de este profesional sanitario.
Este fue el discurso de la intervención de Germán Asís Martínez González, vocal del Colegio Oficial de Farmacéuticos de Bizkaia. “La persona que sufre DA viene a la farmacia para pedirnos consejos, para que le ayudemos. Por eso,
los farmacéuticos tenemos que estar a la última de todas las innovaciones terapéuticas”, añadió.
En su opinión, el trabajo con estos pacientes tiene que ser en conjunto y, principalmente, todos los profesionales sanitarios deben estar sensibilizados con esta patología.
“Porque, en muchas ocasiones, son los propios profesionales los que no han sido conscientes de lo que puede implicar la enfermedad en el día a día de los pacientes”, añadió.
Por eso, Martínez González sostuvo el papel relevante de los profesionales farmacéuticos en la ayuda, a ese “paciente resignado”, que no está en manos del especialista adecuado, sin que le solucione su problema. Un problema de salud que afecta a la calidad de vida del paciente y del entorno que le rodea.
La jornada concluyó con el agradecimiento de los ponentes y del público asistente que subrayaron la
importancia de organizar jornadas de estas características, “para ponernos al día de las novedades, escuchar las reivindicaciones de los profesionales y atender las necesidades de los pacientes en el abordaje de las enfermedades, en este caso de la DA”.