Junio se considera el Mes Internacional del Cuidado de la Fertilidad, pues las enfermedades relacionadas afectan del 15 al 20 por ciento de las parejas, de las cuales el 40 por ciento de las veces tienen origen en la mujer, el 40 por ciento en ell varón y el 20 restante son casos causados por factores desconocidos.
Según el doctor Abraham Martínez, director clínico de Ivinsemer, del total de los casos de infertilidad de origen masculino, la mayor parte de ellos se manifiesta en un estudio de semen (espermiograma) por alteraciones en la cantidad, movilidad y la forma de los espermatozoides. La afección de estos tres factores puede tener orígenes anatómicos, infecciosos, endócrinos, cromosómicos, incluso desconocidos.
La infertilidad en el varón puede ser causada por diferentes hábitos como beber alcohol en exceso, uso de drogas y haber padecido una enfermedad de transmisión sexual pueden dejar secuelas que afecten de manera directa lo que puede afectar la concepción de un embarazo.
Un estudio del 2007 demostró que los hombres de entre 30 y 35 años de edad son, por así decirlo, más fértiles, mientras que a partir de 55 años, la calidad espermática del hombre desciende de manera significante, aminorando paralelamente su capacidad de engendrar debido a la concentración de espermas y su motilidad, es decir, los espermatozoides móviles.
Es necesario que si el varón tiene sospechas de einfertilidad acuda con un especialista para tomar una muestra en la que los parámetros sean claros, las muestras de semen se procesan mediante técnicas de capacitación o preparación seminal, que permiten eliminar espermatozoides muertos, inmóviles o lentos y optimizar la calidad de la muestra que se utilizará en los procedimientos de reproducción asistida.
Si el paciente tuvo un proceso de vasectomía es posible recuperar el semen mediante técnicas como la aspiración testicular que consiste en obtener espermatozoides directamente del testículo por aspiración con aguja del mismo o del epidídimo bajo anestesia local. Por su parte, la biopsia testicular consiste en abrir 2-3 cm la piel del testículo para obtener tejido testicular y con ello espermatozoides.
En casos extremos en que no se pueda encontrar esperma por los métodos mencionados existe una técnica de micro cirugía. Micro-TESE consiste en una biopsia testicular realizada con amplificación visual microscópica (microscopio quirúrgico) y permite identificar las zonas del testículo donde seguramente se encontrarán espermatozoides.
Estas técnicas han demostrado revertir los efectos de la infertilidad, logrando así que hombre y mujeres tengan las mismas oportunidades de combatir los efectos de la infertilidad en México, España y logre expandirse a otros países.