La Fundación Grupo IMO y el Gimnasio Shape Up! de Madrid han desarrollado el proyecto I Fit Good, un programa piloto de ejercicio en el que han participado durante dos meses pacientes diagnosticadas de distintos tipos de cáncer, en su mayoría de mama. Durante el programa I Fit Good las pacientes han asistido a una sesión semanal de 50 minutos de duración en la que se han potenciado diferentes áreas para mejorar la condición física tras los tratamientos. Se ha contado con un programa específico adaptado a las necesidades de este tipo de pacientes y a su condición física en el que se han incluido ejercicios cardiovasculares, fuerza, movilidad, respiración y la flexibilidad.
Arantxa de Lorenzo Fernández de Nograro, directora del gimnasio Shape Up!, el único centro especializado en el ejercicio físico de pacientes y supervivientes con cáncer en España, explica que 'hemos planificado el programa adaptándonos a las necesidades de este tipo de pacientes y su condición física de partida. En función de estas variables se ha elaborado el programa completo'.
Todos los pacientes que han participado coinciden en que han realizado una evaluación positiva del proyecto, han mostrado un alto grado de satisfacción debido al efecto positivo en su salud y en su estado físico en general. 'Hemos observado una disminución de la sensación de fatiga y cansancio posterior a la finalización del programa, que pasó del 87,5 por ciento antes de realizar el programa de ejercicio físico al 43 por ciento. Además, las pacientes indicaban que tras el programa de ejercicio, la fatiga generaba una menor interferencia en las diferentes áreas de su vida diaria. 'Gracias a I Fit Good hemos comprobado la importancia de abordar de forma específica tanto los aspectos emocionales como la condición física para mejorar la fatiga', explica Carmen Yélamos, directora de la Fundación Grupo IMO.
Los pacientes con cáncer componen un grupo con necesidades especiales para la práctica de ejercicio. Es imprescindible para ellos que el ejercicio que realicen esté pensado y adaptado a sus necesidades, con objetivos a corto y largo plazo centrados en aquellas áreas más afectadas y en las capacidades más disminuidas tras el tratamiento. Como explica Arancha de Lorenzo, 'nuestra intención al crear el programa I Fit Good es que el paciente oncológico, que vive sin duda una situación especial, tenga la oportunidad de hacer ejercicio, indispensable para mejorar su estado físico durante el tratamiento y después de él. Pero además, y lo digo con la experiencia de paciente, es necesario realizar esta actividad sintiéndose integrado junto a otros pacientes. En cuanto a resultados, la directora de Shape Up! afirma que 'los pacientes han logrado reducir la fatiga diaria, manifiestan un buen estado físico general, más fuerza y mayor amplitud en el movimiento'.
Además de esta iniciativa, la Fundación Grupo IMO ha editado dos decálogos con consejos básicos dirigidos a pacientes y supervivientes de cáncer antes de comenzar cualquier tipo de actividad física. 'Además de los consejos que ofrecemos en nuestros decálogos, es importante que los pacientes consulten con el oncólogo antes de comenzar cualquier actividad', aclara la directora de la Fundación Grupo IMO.