El gasto medio por paciente en el área de la Endocrinología casi se ha duplicado en los últimos años, debido a un importante incremento de la prevalencia de la diabetes tipo 2, que llega a un 13,8% de la población adulta. Varios factores, como el cambio de los criterios diagnósticos de la diabetes tipo 2, el envejecimiento de la población, una menor mortalidad en los pacientes diabéticos y un aumento de la incidencia han podido influir en que la diabetes se haya convertido en una de las enfermedades con mayor impacto socioeconómico.
A esto hay que añadir que se busca regular mejor los niveles de glucosa, hacerlo de la forma más parecida a como lo haría el páncreas e intentar reducir el riesgo cardiovascular, con la promoción de hábitos de vida saludables.
Con respecto al aumento del gasto asociado al tratamiento, hay que tener en cuenta que los fármacos nuevos, como los inhibidores de DPP-4, arGLP-1, inhibidores SGLT-2 , tienen un mayor coste directo en comparación con las sulfonilureas o la metformina, pero el bajo riesgo de hipoglucemia permite un ahorro relacionado con el coste de las hipoglucemias y el consumo de tiras reactivas de glucemia capilar. Por tanto, a largo plazo estos nuevos fármacos proporcionan mejor control y menos complicaciones, por lo que en realidad el gasto global es menor.
Más consultas
Y es que la incidencia de la diabetes es cada vez mayor y ese aumento se constata en las consultas. En parte, puede deberse a que cada vez hay más personas mayores de 65 años y más obesos, dos condiciones que elevan el riesgo de diabetes. Normalmente, al diagnóstico se suele llegar al controlar otras patologías, como la HTA, la hipercolesterolemia, la obesidad'
En líneas generales, el perfil del paciente de nuevo diagnóstico de diabetes es madre y trabajadora, con obesidad, sedentaria, que acude solicitando un control y revisión rutinaria. La dislipidemia y una circunferencia abdominal prominente con obesidad central conlleva a un síndrome metabólico. Y es que en atención primaria el diagnóstico pocas veces es por sintomatología, la mayoría de veces es por controles analíticos rutinarios, en algunos casos se haría por sintomatología como aquellos que acuden por hipoglucemias. En la consulta de endocrinología suelen ser pacientes derivados de atención primaria o de otras especialidades o pacientes diagnosticados de diabetes durante un ingreso hospitalario.
Los reconocimientos de empresa también identifican a un número importante de diabéticos.
Lo que cuestan las complicaciones
Según la Sociedad Española de Diabetes, el 40% del gasto se debe a las complicaciones por mal control de la enfermedad. Por lo tanto, el arsenal terapéutico actual contribuye al mejor control y, lógicamente, repercute en un ahorro en cuanto a los costes derivados de ingresos o crisis agudas que suponen un tercio del gasto total.
No obstante, el aumento del gasto tiene que hacer reflexionar sobre las expectativas de futuro, ya que se calcula un aumento muy importante de la prevalencia de la diabetes tipo 2 en los próximos años. Esta circunstancia debería movilizar la toma de decisiones en prevención, promoción y educación para la salud para contribuir a garantizar la sostenibilidad del gasto farmacológico venidero.
Como la diabetes es una enfermedad crónica es habitual tener pacientes con edades avanzadas que asocian insuficiencias renales y hepáticas en muchos casos para los cuales estos nuevos fármacos cumplen un papel importante. El mayor coste directo de los fármacos desarrollados más recientemente se ve compensado por su bajo riesgo de hipoglucemia evitando ingresos. Esto supone que, pese al coste elevado de los nuevos fármacos antidiabéticos, el balance es a su favor, ya que es mayor el gasto sanitario de fármacos no antidiabéticos para el tratamiento de las complicaciones.
Con este aumento del gasto, aumenta la presión por dicho aumento. Cuanto mejor se controle la diabetes, menos probabilidades hay de que aparezcan las posibles complicaciones y, por tanto, a largo plazo se ahorrará al disminuir los ingresos hospitalarios. Por eso, los controles actuales tratan de diagnosticar las posibles complicaciones lo antes posible y ponerle tratamiento para que no evolucionen y eso repercute en el gasto farmacéutico.
En este sentido, el gasto farmacéutico ocupa una parcela importante del gasto total sanitario y es comprensible que esté sujeto a un exhaustivo control por parte de los gestores, que induce al profesional a una prescripción adecuada, valorando en ello, entre otras cosas, el precio del fármaco a utilizar.
Para intentar reducir este incremento del gasto, se pueden tomar una serie de medidas que deben de incidir en las mejoras de los programas y protocolos de atención al paciente diabético en el centro de salud. Así, el estudio UKPDS demostró que un control estricto de la glucemia reducía en un 25% la aparición de lesiones microvasculares. Y con un control estricto de la presión arterial disminuían las complicaciones micro y macro vasculares.
Para la elaboración de este artículo se ha contado con la colaboración de los doctores médicos de familia Mª Carmen Marín Nieto, Ana I. Martí Pérez, Andrés M. Botella Soria, José Gálvez Candel y J. Rafael Berna Salas, del Centro de Alicante. Janet Kopke Martín, Vicente J. Juan Alberola, Julio J. González Adrianza y John V. Gutiérrez Sánchez. Silvia Hernández Hernández, Tomás Gómez Bonillo y Aurora María Bey López, y la endocrinóloga Rebeca Reyes García, del Hospital D. Rafael Méndez, y los médicos de Atención Primaria Elizabeth Iturricastillo Arana, Mariana Camelia Luta, Remedios López López, Juan Carlos González Romero y Vicente López Escrivá, del Centro de Salud San Fermín, de Elche.