Durante los pasados 21 y 22 de octubre Torremolinos (Málaga) albergó el IX Encuentro Andaluz de Neonatólogos. Este encuentro nació con el objetivo claro de lograr una armonización en las actuaciones clínicas en Andalucía que permiten a los neonatólogos de la región trabajar en red. El encuentro, al que asistieron 150 especialistas, fue organizado por Antonio Losada (profesor asociado y jefe de Servicio y director de la UGC de Neonatología del Hospital Universitario de la Mujer e Infantil Virgen del Rocío de Sevilla), Gonzalo Lastra (profesor titular de Pediatría y jefe de Sección de Neonatología del Hospital Materno Infantil Carlos Haya de Málaga) y Enrique Salguero (director de la UGC y jefe de Servicio de Neonatología del Carlos Haya). Las jornadas se realizaron con la colaboración de la Sociedad Española de Neonatología (SEN) y de Abbott.
El IX Encuentro de Neonatólogos en Andalucía contó con tres mesas de discusión, centradas en los temas de Hematología, Neurología e Infectología neonatal.
La Mesa de Infectología Neonatal dirigió sus ponencias hacia las áreas de las infecciones nosocomiales y la prevención del Virus Respiratorio Sincitial (VRS), cuya estación epidémica acaba de iniciarse.
El VRS, también conocido como el 'virus de los bebés', es altamente contagioso y permanece activo durante todo el año presentando, en los meses más fríos desde octubre a abril, un incremento de su incidencia con picos más elevados en diciembre y enero. 'En Andalucía, suele comenzar en la segunda mitad de octubre y principios de noviembre', según el doctor Antonio Pérez Sánchez, facultativo especialista de Área de la Unidad de Gestión Clínica de Neonatología del Hospital Materno Infantil Virgen del Rocío (Sevilla).
La infección por VRS, según el doctor Losada, 'antes de los dos años de edad, afecta a prácticamente el cien por cien de los niños, ha ido aumentando en las últimas décadas y es el principal causante de la bronquiolitis, una enfermedad de las vías respiratorias'. Esta patología se manifiesta con síntomas similares a los de la gripe estacional, si bien puede agravarse y tener un peor pronóstico en los casos de niños en riesgo como son los lactantes, niños con cardiopatías congénitas, los que padecen síndrome de Down y bebés prematuros.
En la mayoría de los casos de infección por VRS, los bebés combaten el virus con sus propios anticuerpos. Sin embargo, para estos bebés en riesgo puede traducirse en un ingreso hospitalario. Para el doctor Losada, 'el VRS es muy importante debido a su morbilidad, pues demanda mucha asistencia sanitaria, genera grandes complicaciones y en ocasiones, incluso puede tener un desenlace fatal. Además, parece ser desencadenante de patología respiratoria en edades posteriores'.
Abordaje de la Infección por Virus Respiratorio Sincitial
Actualmente, el tratamiento de la bronquiolitis no cuenta con una terapia definitiva. Paralelamente, los expertos recomiendan mantener una vigilancia intensiva en épocas de mayor agresividad de contagio, así como medidas de prevención. En palabras del doctor Pérez Sánchez, 'además de los anticuerpos monoclonales, que se administran mensualmente durante la época epidémica, las medidas higiénicas de lavado de manos en los cuadros catarrales son imprescindibles; intentar evitar los ambientes de riesgo epidémicos, zonas de hacinamientos y centros escolares o ambientes contaminados son efectivos para la disminución de la transmisión del VRS'.
En relación a la eficacia de la inmunoprofilaxis con anticuerpos monoclonales, el doctor Losada puso de manifiesto que, 'está lo suficientemente contrastada para su aplicación en las indicaciones aceptadas por los comités de expertos y los estudios científicos'.
Por último, en las mesas de Hematología y Neurología se abordaron los retos de los bebés prematuros con el sistema hematológico o neurológico comprometido. En el caso de la problemática hematológica, puede extenderse desde un nivel más cotidiano como las anemias hasta cuadros más graves como la leucosis. En el caso de los bebés con problemas neurológicos, según el doctor Salguero, 'el reto lo tenemos la familia del bebé prematuro y nosotros como profesionales; por lo que es muy importante poner en marcha un programa de seguimiento y de estimulación temprana para mejorar el pronóstico final, en lo que a secuelas se refiere'.