Según datos de la Fundación Mexicana del Riñón, existen actualmente en México entre: 8 y 9 millones de personas con Insuficiencia renal en etapas tempranas, 109.000 personas con Insuficiencia renal crónica (estadio 5) y cerca de 60.000 personas con tratamiento sustitutivo de la función renal, es decir con necesidad de diálisis.
La deficiencia en la función del riñón es más peligrosa de lo que se cree, pues si la tasa de filtración glomerular, es decir, la efectividad con la se filtran los líquidos corporales, disminuye, es necesario llevar al paciente con un especialista, en este caso, un nefrólogo.
Según el doctor Guillermo Olivares Beltrán, médico oncólogo la sintomatología es edematización o hinchazón de los pies por retención de líquido, la detección de sangre en la orina ya sea visible o mediante un Estudio General de Orina, ya que la presencia sanguínea puede ser microscópica.
El tabaquismo, obesidad, hipertensión y la diabetes pueden ser los antecedentes directos de esta enfermedad, la parte más importante es la dieta, pues el consumo de sales en exceso, de grasa animal y de carbohidratos puede acelerar la aparición de dicho padecimiento.
Cifras del Instituto Nacional de Geografía y Estadística (INEGI), la Insuficiencia renal es la quinta causa de muerte más importante entre la población mexicana, ya que anualmente mueren cerca de 12 mil personas por complicaciones relacionadas.
El también presidente de la Sociedad de Oncología y Radioterapia del Hospital ABC afirmó que la obesidad, el tabaquismo, la insuficiencia renal y obstrucción de las vías urinarias podrían ser síntomas de cáncer de riñón.
Si la persona presenta un dolor abdominal o siente una masa extraña en su cuerpo debe ser revisado mediante estudios de imagenología, es decir un ultrasonido para determinar la causa de ese dolor, pues el cáncer renal no presenta síntomas evidentes, es por eso que se debe mantener un estilo de vida sano.
El doctor Olivares mencionó que evitar el consumo de sales, de grasa animal y comer en su lugar abundantes verduras y frutas, además de disminuir la cantidad de carbohidratos y hacer alguna actividad física puede reducir drásticamente el riesgo a desarrollar algún cáncer.
Se estima que si no se adopta la cultura de la prevención en México se espera que para el año 2030 aumente al menos en un 40 por ciento la posibilidad de desarrollar cáncer, es decir que una de cada cuatro mujeres y uno de cada tres hombres podría padecerlo.