El objetivo principal en los pacientes con diabetes es mantener la glucemia en rangos normales y de la forma más fisiológica posible, con el menor riesgo de hipoglucemias. La insulina se muestra como el fármaco más potente y efectivo en el control de la diabetes. La aparición de la insulina de acción prolongada y de administración cada 24 horas se convierte en una herramienta fundamental para pacientes con diabetes tipo 2 no controlada con tratamiento oral.
El papel de la insulina no sólo es el ajuste de la glicada en casos en los que no se han agotado las opciones orales, sino también en los inicios de tratamiento en los que existe una insulinopenia o una insulinorresistencia tan elevada que han aparecido síntomas cardinales de diabetes.
A la hora de iniciar la insulinoterapia hay que educar tanto al paciente como a su cuidador para que lo haga de forma correcta: ajustes de dosis, dispositivo, técnica de administración así como nociones nutricionales básicas. Es necesario que conozcan cómo actuar ante una hipoglucemia.
En este contexto, cabe destacar la importancia de las nuevas tecnologías aplicadas a la diabetes, que tratan de aumentar el control, la calidad de vida y la seguridad de estos pacientes. Entre estos elementos destacan la utilización del monitor continuo de glucosa y la implementación de sistemas multimedia con sistemas de alarma interconectados con el médico o educador de referencia.
La insulina de acción prolongada es necesaria para pacientes con diabetes tipo 2 no controlada con tratamiento oral
La insulina se muestra como el fármaco más potente y efectivo en el control de la diabetes. Su inicio en diabéticos tipo 2 se establece cuando no se consiguen los objetivos con antidiabéticos orales y con cambios en el estilo de vida.

Clara Simón
28 de marzo 2023. 10:37 am