La crisis manda y a la hora de evaluar innovación lo que se evalúan principalmente son los costes. Está claro que los presupuestos son finitos y que no puede pagarse todo, pero también que no puede cerrarse la entrada a la innovación, y por ello, es hora de buscar soluciones diferentes. Esa es una de las tareas que se ha emprendido desde la compañía Johnson & Johnson, que desde su Departamento de Economía de la Salud, y de manera aparte del campo comercial, opera para aportar valor y conocimiento, y sobre todo, en experiencias para rediseñar, junto con los hospitales, sus modelos de atención. Así recientemente, por ejemplo, firmaba un acuerdo marco de colaboración con el Instituto de Validación de Eficiencia para trabajar de forma conjunta en la evaluación de la eficiencia de las nuevas técnicas, tecnologías o procedimientos en las áreas de Traumatología y Ortopedia, Neurología, enfermedad metabólica y reconstrucción mamaria.
Para hablar más sobre este tipo de proyectos EL MÉDICO INTERACTIVO ha hablado con Fernando Oliveros, director general de Global Orthopedic Johnson & Johnson, que insiste en que 'hay que cambiar la dinámica del acceso a la innovación solo basado en precios, y estamos intentando colaborar en un entorno de mayor coordinación entre autoridades, prestadores de servicios, las compañías, los médicos, y obviamente los pacientes, para identificar proyectos de valor'. Así, el objetivo pasa por trabajar para que todo el modelo se mida integralmente y que seamos más eficientes, ya que 'si seguimos en la vía solamente de precio, los resultados en salud van a ser peores de los que estamos obteniendo'.
Un modelo de ejemplo en el campo de la Ortopedia
Oliveros habla más de esta nueva iniciativa en el campo que mejor conoce, el de la Ortopedia. Así explica que 'nos hemos dado cuenta de que el proceso de remplazarle una cadera a un paciente no solamente es el acto quirúrgico, sino que hay una serie de actividades de precirugía que tiene que ver con cómo informamos al paciente. Se trabaja con el hospital, tanto en esto, como en los tiempos de la cirugía para que todo esté protocolizado, y el tiempo y la calidad de la cirugía estén ajustados a los máximos niveles, pero también en la recuperación del paciente, en la movilización temprana, la monitorización desde el domicilio, etc.'.
En cuanto a los resultados obtenidos tras la implantación de estos protocolos y su evaluación se resume en que 'estamos reduciendo entre dos y cuatro días la estancia posterior a la cirugía del paciente, es decir, una reducción del 50 por ciento, lo que también tiene un impacto muy importante en costes, y lo que hace que el precio del implante se vuelva menos relevante, evaluando lo que es la eficiencia en el coste de todo el procedimiento'. Un factor a tener en cuenta hoy en día, porque 'cuando se toman decisiones basadas únicamente en el coste se puede llegar a influir en la calidad de la atención, y si bien puede haber un ahorro en el precio del implante, puede haber un coste mayor en el proceso porque las recaídas, por ejemplo, pueden ser mayores'
Se trata de una iniciativa aún incipiente y que cuenta sólo con algunos programas piloto en la zona de Cataluña, en Valencia y en Madrid. 'Todavía son pocos hospitales, apenas unos 4 ó 5, un ejemplo de ellos sería el Parc Taulí, un hospital en Sabadell, y estamos negociando con el Hospital Clínico San Carlos en Madrid'.
A modo de conclusión, el director general de Global Orthopedic Johnson & Johnson, insiste en 'invitar a todos los actores del sistema a que rompamos un poco la inercia del pasado y nos atrevamos a colaborar y a integrar soluciones, que permitan mirar la salud de una manera diferente y afrontar el reto de ser más eficientes, pero con los mismos o mejores resultados en salud'.