La Asociación Madrileña de Pediatría de Atención Primaria advierte de la falta de profesionales

Los pediatras de Atención Primaria de Madrid (AMPap) reclaman medidas para paliar el déficit de profesionales. Insisten en que el principal problema de la Atención Primaria desde hace demasiado tiempo es la falta de recursos humanos, principalmente médicos. Todo ello provoca consultas cada vez más extensas e “inasumibles”. Esto a su vez desincentiva todavía más a las nuevas generaciones, que prefieren otras salidas laborales antes que buscar trabajo en los centros de salud. La mayor muestra de esta situación se ha visto hace sólo una semana, cuando se convocó a los recién terminados MIR de pediatría y medicina de familia. Apenas 5 nuevos pediatras de 76 eligieron plaza en un centro de salud de Madrid para comenzar su actividad profesional como adjuntos. Por otra parte, tan sólo 17 nuevos médicos de Familia de 224 que han terminado su formación este año, se van a quedar en la Atención Primaria madrileña

Razones de la falta de profesionales

Las razones de esta falta de profesionales son múltiples y han sido expuestas a los gerentes en incontables ocasiones. Una de las principales razones es el horario de tarde, que impide conciliar a los nuevos médicos, que están comenzando a formar sus familias. La falta de profesionales provoca agendas sobresaturadas. A esto hay que sumar los pacientes de los compañeros que están de baja o permiso. Incluso de las plazas vacantes sin cubrir, en el propio centro e incluso de los centros próximos. También las incontables consultas forzadas de pacientes sin cita, que acuden al centro y tienen que ser vistos, sin un triaje ni filtro adecuado. “No se puede mantener la Atención Primaria sin su principal activo: médicos de familia y pediatras”, insiste AMPap. La asociación lleva más de 20 años advirtiendo de que esto iba a ocurrir. Ahora no se trata de una advertencia, es una realidad. La AMPap exige a la Comunidad de Madrid que aplique medidas de calado para atraer a nuevos profesionales y para evitar la huida de los actualmente aún presentes.