Para aproximadamente 8 millones de estadounidenses, visitar a un médico regularmente es la clave para controlar su psoriasis, una afección inflamatoria crónica de la piel caracterizada por manchas rojas dolorosas o con picazón que pueden aparecer en cualquier parte del cuerpo. Pero para algunas personas,…
Para aproximadamente 8 millones de estadounidenses, visitar a un médico regularmente es la clave para controlar su psoriasis, una afección inflamatoria crónica de la piel caracterizada por manchas rojas dolorosas o con picazón que pueden aparecer en cualquier parte del cuerpo. Pero para algunas personas, ver a un especialista regularmente puede ser un desafío monumental, especialmente para aquellos que viven en comunidades rurales o marginadas.
Sin embargo, un nuevo estudio dirigido por la Escuela de Medicina Keck de la Universidad del Sur de California (USC, por sus siglas en inglés), en Estados Unidos, plantea la posibilidad de que algún día las personas con psoriasis puedan simplemente conectarse a Internet para recibir su atención. Publicado en 'JAMA Network Open', el trabajo encontró que la atención 'online' y en persona eran igualmente efectivas para mejorar los síntomas de la psoriasis.
'Los pacientes con enfermedades crónicas de la piel necesitan atención continua y, dependiendo de dónde vivan, su acceso a la atención dermatológica puede ser variable', dice la autora principal del estudio, April Armstrong, profesora de Dermatología (académica clínica) y decana asociada de Investigación Clínica en la Escuela Keck. 'Nuestro estudio sugiere que un modelo de prestación de atención 'online' es una forma efectiva de brindar atención de alta calidad a los pacientes, independientemente de dónde vivan o cómo se vean sus horarios de trabajo/vida', añade.
En el estudio multicéntrico, Armstrong y sus colegas dieron seguimiento a casi 300 pacientes que habían sido asignados al azar para recibir atención en línea o en persona y monitorizaron la mejoría de sus síntomas. Los pacientes que recibieron la atención en línea iniciaron una sesión en una plataforma de salud conectada y segura basada en la web donde podrían comunicarse con su proveedor de atención primaria o dermatólogo, compartir imágenes de su piel y recibir recomendaciones de tratamiento.