La pérdida de fertilidad de los hombres sigue siendo un tema tabú, a pesar de que está presente en la mayoría de las parejas con problemas para lograr embarazo, siendo un factor determinante en casi el 30 por ciento de los casos. De hecho, según los estándares marcados por la Organización Mundial de la Salud (OMS), entre el 30 y el 50 por ciento de los hombres en edad fértil tiene una baja calidad espermática.
La calidad espermática depende, generalmente, de cómo haya sido el periodo de formación de los espermatozoides, conocido como espermatogénesis. Si este proceso de desarrollo presenta fallos, la producción o la calidad espermática pueden verse afectadas. Sin embargo, la calidad espermática puede disminuir también por factores externos ajenos al proceso de espermatogénesis.
Las causas de infertilidad masculina están directamente relacionadas con las características del semen y los espermatozoides que contiene. En unos casos, la presencia de espermatozoides en el eyaculado es nula (azoospermia), bien porque no se fabrican, por estar obstruida la salida o por eyaculaciones retrogradas. En otros, hay eyaculaciones de bajo volumen (hipospermia), o de baja producción de espermatozoides (oligozoospermia). Otras alteraciones que pueden sufrir los hombres en su esperma son las anomalías morfológicas (terazoospermia) o la movilidad reducida (astenozoospermia). También están los problemas en la fragmentación del ADN, y en muchas ocasiones los problemas van asociados.
La calidad espermática puede verse afectada por problemas externos
El estrés, las altas temperaturas, los medicamentos o las sustancias tóxicas pueden afectar a la misma
El Médico Interactivo
11 de septiembre 2023. 1:50 pm